Pocos artistas cuentan con la destreza vocal para afianzarse en varios géneros y consolidar una carrera que presente los matices propios de cada época, cuando esto se logra, es más fácil mantener la vigencia a través del tiempo.
Esto aplica perfectamente para el intérprete cartagenero Juan Carlos Coronel, quien alcanza más de tres décadas sobre los escenarios y en las cuales ha podido decantarse por géneros diversos al momento de cantar.
Sus inicios se remontan a la música tropical y la salsa, sin embargo allí no quedó demostrado todo su talento, más adelante se adentró en todo lo que pudo absorber de su raíz familiar muy ligada a la música en todos los aspectos, es así como el bolero y el jazz no han sido ajenos a su repertorio.
Precisamente ahora Coronel cumple una serie de conciertos programados como un homenaje en el mes de las madres y allí su voz deleita al son de boleros y baladas clásicas que han recorrido el cancionero latino.
Indica que hace muchos años ha pretendido presentarse en Cartagena, pero diferentes motivos lo han impedido, sin embargo llegó el momento de cantar para su ciudad y es por eso que la emoción lo embarga al poder esta noche cumplir con esa cita en el Centro de Convenciones con su concierto denominado “Madre mía”.
En esta oportunidad, la puesta en escena preparada por Juan Carlos Coronel lo lleva en un viaje musical entre las baladas tradicionales y el repertorio del reconocido cantante mexicano José José, un homenaje que hace parte de su show y que además de la gira nacional incluye conciertos durante el mes de junio en Panamá, Costa Rica y México.
Lo que viene
Aunque no revela mucho de lo que está por venir, pues siempre se ha destacado por el factor sorpresa en sus producciones, Juan Carlos Coronel adelanta que paralelo a este proceso que cumple por Latinoamérica, prepara un nuevo trabajo discográfico.
El ensamble de este producto se está llevando a cabo en Estados Unidos y lo ha contextualizado dentro del sonido Big Band que tanto le atrae al cantante y que va a tener, a su manera de expresar, diferentes matices dentro del plano romántico.
De otra parte, teniendo en cuenta la insistencia de sus seguidores, los medios y hasta de su gente más cercana, que solicitan su regreso a la música tropical, de la cual se encuentra distanciado desde hace más de diez años, Juan Carlos empieza a programar un producto bajo esta línea.
Él es consciente de que se trata de un mercado fiel, además quiere complacerlos y hacerlo consigo mismo, ya que sus raíces siguen latentes y en ese ritmo se siente tan cómodo como el primer día.
En ese proceso, que ya cuenta con un camino recorrido, Coronel confiesa que a sus manos y oídos han llegado unas canciones extremadamente interesantes, por lo que ha decidido enfocar parte de su tiempo a concretar un proyecto musical que refleja diferentes estados emocionales dentro de la música colombiana. Allí no sólo habrá salsa, también se escuchará la cumbia, el porro, mapalé, chandé, fandango, en general, música caribeña.
Juan Carlos ve este periodo como el momento propicio para retomar la música tropical, abanderarla y actuar siempre como el precursor, pues siente que los exponentes que llegaron en años recientes, no han consolidado el género y es por esto que ha perdido la difusión que merece.
“La música tropical en este momento es un radio apagado y yo quiero ser precisamente ese punto de partida y reoxigenación, estoy empeñado en lograrlo y cuento con la colaboración de colegas y amigos para lograrlo”, indica.
Un sonido internacional
Juan Carlos Coronel se ha preparado para lo que está sucediendo en su carrera musical. Su más reciente trabajo discográfico, “Lenguaje Universal”, le ha merecido la mejor opinión de la crítica especializada y del mismo prepara una gira alrededor del país, acompañado por una Big Band.
Como la mejor manera de saldar esta deuda musical con Cartagena, afirma que prepara también esa presentación en la ciudad que lo vio nacer o cómo él mismo dice, “aquí está el Grammy cartagenero”.
El artista hace gala de todos sus argumentos vocales y la experticia de más de tres décadas de carrera para brindar un repertorio cargado de romanticismo, basado en un espectro amplio dentro de la música latinoamericana, como es el bolero, la balada, el jazz y el pop.
Al interrogársele sobre su lejanía con esos ritmos que lo vieron nacer en la música y por los cuales aún se le identifican, advierte que siempre quiso hacer una carrera con proyección internacional, pues si bien en México, Panamá, Perú o Ecuador, siguen sonando sus éxitos salseros, su misión era también llegar a otros escenarios y lograr una trayectoria más longeva sin depender de la canción que suena en la radio en un momento determinado.
Este artista ha enfocado su carrera en proyectos a corto, mediano y largo plazo, alejado de lo coyuntural con una canción que suene a éxito, por esto en la medida que ha crecido y su nombre se posesionó, fue aceptado con la versatilidad que su voz se lo ha permitido.
Con todo lo anterior, el cartagenero se declara satisfecho, aunque considera que tiene una deuda que espera saldar muy pronto y tiene que ver con una idea que le ronda hace algún tiempo de hacer un álbum de mariachis, que se grabaría en México y que se ampara en la aceptación que logró en ese país.
Para ese proyecto le apuesta a canciones inéditas y no descarta la inclusión de algún clásico, de la misma manera se declara amante del tango, pues para él representa la melancolía y sentimientos de todos los latinoamericanos, entonces no descarta incursionar allí también.