Durante el fin de semana, las hacedoras del corregimiento lograron en ventas 210 millones de pesos. Más de 15 mil personas visitaron al lugar en el marco del piloto de ‘Sazón Atlántico’.
La hoja del bijao guarda y aporta un nuevo sabor al milagro del pastel, una exquisitez surgida en las noches de la esclavitud como una prodigiosa sobra que los esclavizados conservaron en las madrugadas de hambre.
En 48 horas de festival se lograron vender más de 1.000 unidades, con los que se benefició a unas 30 matronas de Pital de Megua, jurisdicción de Baranoa.
Días que parecen repetirse, dormir en la mañana... estar despiertos en la noche. Todo lo que podamos experimentar es válido para escapar de un mundo en confinamiento.
