Tras esto, las autoridades dejaron a las niñas de 6 y 9 años, a disposición del Instituto de Bienestar Familiar y el caso de abandono seguirá en investigación.
La vida de este barranquillero cambió de la noche a la mañana al enterarse que era adoptado y que, en algún lugar de Cartagena, tenía a un hermano idéntico a él.