La lactancia materna favorece un buen vínculo madre-hijo y una adecuada relación de apego seguro, esenciales para un correcto desarrollo del bebé como persona independiente y segura.
Investigadores del Centro de Investigación sobre Nutrición Humana y Envejecimiento de la Universidad Tufts de Massachusetts (EE. UU.) hicieron el hallazgo.
La lactancia materna es clave para el crecimiento y el desarrollo neurológico de los bebés, pero esta práctica debe realizarse de forma segura y cómoda.