Tomar venganza por su cuenta le salió caro a Ricardo Andrés Torres Botello en Ocaña, Norte de Santander. La Fiscalía General de la Nación lo condenó 54 años y 4 meses de prisión por los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio, y hurto calificado y agravado. Le puede interesar: ¡Qué cruel! Discutió con su hermano y lo mató de un balazo el Viernes Santo
En un comunicado oficial, el ente acusador relató que los hechos ocurrieron en la madrugada del 10 de diciembre de 2014, en el barrio La Esperanza de Ocaña. La investigación da cuenta que el hoy condenado llegó hasta la residencia de las víctimas, a quienes conocía por ser familiares de su exnovia. Cuando ingresó a la casa agredió con arma blanca a una mujer de 40 años y a su hijo de 11 años, causándoles la muerte mientras dormían”. En el acto brutal también dejó herido a un menor de 9 años que estuvo varios meses hospitalizado.
“Investigadores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y de la Policía Nacional, a través de entrevistas, inspección el lugar de los hechos y con reconocimientos fotográficos lograron identificar a Torres Botello como autor material del ataque, así como la persona que habría hurtado una tablet y dinero en efectivo”, añadió la Fiscalía.
Añadió que durante el proceso se comprobó que el hombre cometió los asesinatos en venganza porque su exnovia, hermana de la víctima, había finalizado la relación sentimental que tenía con él y no quería continuar.
El sentenciado era un destacado profesor de tenis en Ocaña.
