Recientemente se ha hecho popular una tendencia relacionada con el mundo de las cirugías estéticas. Se trata de un procedimiento con el que los hombres buscan crecer algunos centímetros. Algunos justifican el deseo de realizar esta intervención con la premisa de que las mujeres, generalmente, no se involucran con hombres de poca estatura.
Sin embargo, expertos aseguran que quienes desean tener esos resultados, se someten a una operación invasiva que implica romper los huesos, pasar varias semanas de convalecencia y un proceso de recuperación bastante lento, durante el cual el paciente no puede caminar por meses. Lea aquí: Los hombres van a la estética por autoestima
“Es una operación dolorosa, que implica un proceso de recuperación largo debido a que una parte del hueso queda blanda por lo que se debe esperar a caminar hasta que ese hueso pueda sostener de nuevo el peso del cuerpo”, aseguró a BBC Mundo el cirujano Kevin Debiparshad, quien se dedica a realizar este procedimiento.
Lo alarmante es que varios cirujanos, entre ellos Debiparshad, han notado un aumento en la demanda de esta cirugía en pacientes hombres: “Ya va quedando atrás el tabú de que los hombres no se realizan cirugías estéticas”, señaló el experto.
Por otra parte, esta cirugía se realizó durante años, especialmente en países orientales, a las mujeres. Incluso, medios internacionales recalcan que muchas mujeres en China se han sometido a una operación similar para tener más estatura. Le puede interesar: Qué hacer si quiere practicarse una cirugía plástica en Cartagena
Esta tendencia se reafirma con las cifras que presentó la Asociación Estadounidense de Cirujanos Plásticos, pues señala que las cirugías plásticas han aumentado en un 30% en hombres comparada con la década anterior.

¿La rehabilitación es una pesadilla?
Esta práctica ha estado rodeada de controversia y esto se debe a que la Asociación Estadounidense de Cirujanos Plásticos y la Academia Estadounidense de Ortopedistas aseguraron a BBC Mundo que “la cirugía de alargamiento de piernas es un procedimiento ortopédico con fines cosméticos”.
“Esa técnica ha evolucionado mucho, pero realmente la idea era la misma: lo que hacemos es que el hueso mismo llene el espacio que queda luego de la rotura y allí es donde se ganan los centímetros de más que quiere el paciente”, explicó Debiparshad. Lea: Turismo en cirugía plástica, lo que debe saber
El procedimiento es así: primero se realiza un agujero en los huesos de las piernas, se pone una barra de metal en el interior del hueso que se mantiene en su lugar gracias a una serie de tornillos.
Después de la operación, la barra se alarga lentamente hasta un milímetro cada día hasta que el paciente logra la altura deseada y sus huesos sanan nuevamente.
¿Cuáles son los riesgos?
Este es uno de los aspectos que más alerta a los especialistas, pues aseguran que la mayoría de los pacientes no son conscientes de las posibles complicaciones que puede conllevar este procedimiento, entre ellos: lesiones nerviosas, embolias arteriales y la posibilidad de que los huesos no se vuelvan a fusionar.
Además, se debe tener en cuenta el riesgo que representa para la salud mental, debido a que algunos pacientes podrían tener dismorfia corporal, lo que los lleva a darle mayor importancia a la operación que a su bienestar físico y emocional. Lea también: ¿Quiere practicarse una cirugía plástica?
“Cuando se enfrentan al dilema de elegir un lugar con experiencia quirúrgica en este tipo de operaciones o un lugar para hacerlo a bajo costo, no creo que las personas sean conscientes de todas las cosas que pueden salir mal y que, a menudo, salen mal”, dijo el cirujano ortopédico, David Goodier, a la BBC.