Un pie diabético es una extremidad con heridas o úlceras, en una persona que padece de diabetes. Es una condición crónica que se produce por mantener niveles de glucosa más elevados de lo habitual y se caracteriza por la disminución de la sensibilidad en el pie (neuropatía) y disminución de la circulación de la sangre (isquemia). Ambos factores pueden predisponer la aparición de una ulceración en el pie, que puede darse en pacientes con diabetes tipo 1 o tipo 2.
Las infecciones del pie constituyen la infección de partes blandas más frecuente en el diabético y pueden llevar a osteomielitis, amputación o a la muerte. El espectro de infecciones va desde la celulitis localizada a infecciones profundas con fasceítis necrozante y/u osteomielitis.
La Federación Diabetológica Colombiana en su publicación “Diabetes Control & Prevención” concluye que el 15% de todas las personas con Diabetes Mellitus desarrollarán una úlcera en el pie durante el transcurso de su enfermedad y el 60% de las amputaciones de miembros inferiores no traumáticas son consecuencia del pie diabético.
La Diabetes Mellitus es un proceso crónico que aparece cuando el páncreas no produce suficiente insulina o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que genera. El pie es una de las partes del cuerpo que puede verse más afectada por esta enfermedad, dando lugar a lo que conocemos como “pie diabético”. El Doctor Arturo Orduz, diabetólogo, médico especialista en pie diabético de la de la Fundación Santafé de Bogotá, epidemiólogo y especialista en docencia universitaria añade:
¿Por qué es importante el cuidado de los pies en el paciente diabético?
- En la evolución de la diabetes, las complicaciones más frecuentes son la afectación de nervios y arterias. Las alteraciones vasculares alteran la circulación sanguínea y facilitan la aparición de edemas y de zonas mal vascularizadas, que dificultan la curación de las lesiones y heridas, estas alteraciones tienen especial repercusión en los pies los cuales si no se cuidan se convierten en úlceras, facilitan la infección y pueden llevar a la gangrena y a la necesidad de amputaciones.
Observe a diario el pie
Es aconsejable que todos los días el paciente diabético o un familiar observe con detenimiento los pies prestando especial atención a la punta del dedo gordo, al resto de dedos, sobre todo por la parte de abajo, al talón y a la planta , si vemos que aparece alguna rozadura, herida o enrojecimiento lo ideal es acudir a un especialista .
Use crema humectante
Hay que evitar la resequedad y la mejor manera es tener los pies bien hidratados con crema humectante pues ayuda a que no aparezcan callosidades o durezas.
Calzado de calidad
Preferiblemente usar tennis con airbag o zapatos de piel, es recomendable revisar su interior todos los días ya que una pequeña piedra, por ejemplo, puede causar una herida.
Medias
A la medida, sin costuras, que no aprieten y sean protectoras, son las indicaciones a tener en cuenta.
Comunicación con
su equipo médico
Que usted pueda comentarle a su médico cualquier inquietud, que lo pueda llamar y enviarle fotos en caso de requerirse es indispensable, ellos le darán las mejores indicaciones.