Hablar de epilepsia es hablar también de su principal característica: las convulsiones. Según los expertos, la epilepsia es una enfermedad crónica cerebral caracterizada por convulsiones recurrentes que afectan a cerca de 500 mil colombianos y a 50 millones de personas a nivel mundial.
Hoy, en el Día Mundial de la Epilepsia, es importante resaltar que los episodios de convulsión son momentos clave que exigen una reacción oportuna por parte de quien lo presencie, para preservar la seguridad del paciente.
Estas son las claves, según GSK, empresa de investigación bioquímica, para identificar los síntomas y signos de estas crisis, y actuar de manera oportuna.
Las convulsiones son producto de descargas eléctricas excesivas de grupos de células cerebrales que pueden producirse en diferentes partes del cerebro. Su intensidad dependerá de en qué parte del órgano comienza y cómo se propaga. Se manifiestan con breves movimientos involuntarios que pueden afectar a una parte del cuerpo (convulsiones parciales) o a su totalidad (convulsiones generalizadas).
• Una vez la persona se recupere, es importante tranquilizarla y mostrar apoyo.
• Llevarla a un lugar tranquilo y ayudarla a orientarse.
• En caso de que la crisis dure más de 5 minutos se debe acudir al médico de manera urgente.
Hablar de epilepsia es hablar también de su principal característica: las convulsiones. Según los expertos, la epilepsia es una enfermedad crónica cerebral caracterizada por convulsiones recurrentes que afectan a cerca de 500 mil colombianos y a 50 millones de personas a nivel mundial.
Hoy, en el Día Mundial de la Epilepsia, es importante resaltar que los episodios de convulsión son momentos clave que exigen una reacción oportuna por parte de quien lo presencie, para preservar la seguridad del paciente.
Estas son las claves, según GSK, empresa de investigación bioquímica, para identificar los síntomas y signos de estas crisis, y actuar de manera oportuna.
Las convulsiones son producto de descargas eléctricas excesivas de grupos de células cerebrales que pueden producirse en diferentes partes del cerebro. Su intensidad dependerá de en qué parte del órgano comienza y cómo se propaga. Se manifiestan con breves movimientos involuntarios que pueden afectar a una parte del cuerpo (convulsiones parciales) o a su totalidad (convulsiones generalizadas).
• Una vez la persona se recupere, es importante tranquilizarla y mostrar apoyo.
• Llevarla a un lugar tranquilo y ayudarla a orientarse.
• En caso de que la crisis dure más de 5 minutos se debe acudir al médico de manera urgente.
Síntomas y signos:
-Perder el conocimiento, conciencia y el control de los esfínteres.
-Caer al piso.
-Rigidez generalizada.
-Alteraciones de movimiento de los sentidos (incluyendo visión, audición y gusto).
-Cara morada.
-Mordedura de lengua.
-Cambios de estado de ánimo u otras funciones cognitivas.