El 2020 fue el Año Internacional del Personal de Enfermería y de Partería, destacado por la Organización Mundial de la Salud para reconocer la importancia de este personal en la prevención y el control de infecciones (PCI).
Ellos son esenciales para prestar una atención limpia y más segura en primera línea de la salud, resalta la OMS, pero, como todo en 2020, la pandemia de coronavirus redireccionó estos planes globales... y justamente dio en el clavo: la higiene.
Uno de los objetivos para este año, con la conmemoración anual, era proporcionar acceso universal a estaciones públicas de higiene de las manos y hacer que su uso fuera obligatorio al entrar y salir de cualquier edificio comercial, público o privado, y de cualquier servicio de transporte público (¿cómo la ven?, como una profecía).
Asimismo, se buscó mejorar el acceso a las instalaciones y prácticas de higiene de las manos en los centros de atención de salud.
Hoy tenemos esperanza en las vacunas, pero aún no hay acceso a ellas en países subdesarrollados como el nuestro, por lo cual desde el Gobierno nacional y el Ministerio de Salud se ha reforzado el mensaje de prevención para el correcto lavado de manos, a raíz del COVID-19 pues siguen en riesgo los adultos mayores de 60 años y las personas con enfermedades preexistentes.
Promocionar el lavado de manos (o bien el uso de antibacterial) es la acción más económica y efectiva que ayuda a prevenir enfermedades, así, algunos momentos esenciales en los cuales se debe realizar esta práctica son:
- Antes de entrar a cualquier establecimiento y al salir.
- Antes de comer o dar de comer y antes de amamantar, y antes y después de preparar alimentos.
- Después de usar el baño, ayudar a limpiar a un niño y/o anciano, o después de cambiar un pañal.
- Cuando las manos están contaminadas por secreción respiratoria.
En casa se triplicaron los cuidados para evitar el virus y entre las recomendaciones de Minsalud están:
- Lavar y desinfectar en forma regular pisos, paredes, puertas y ventanas, e incrementar estas actividades en las superficies de los clósets, roperos, armarios, barandas, pasamanos, picaportes, interruptores de luz, puertas, gavetas, topes de puertas, muebles, juguetes, bicicletas y todos los elementos con los cuales las personas tienen contacto constante y directo.
- La limpieza y desinfección debe realizarse procurando seguir los pasos: retiro de polvo, lavado con agua y jabón, enjuague con agua limpia y desinfección con productos de uso doméstico.
- Limpiar y desinfectar todo aquello que haya estado en el exterior de la vivienda o que es de manipulación diaria.
- Lavar fundas, sabanas, toallas, etc.
- No sacudir las prendas de ropa antes de lavarlas para minimizar el riesgo de dispersión de virus a través del aire. Dejar que se sequen completamente.
¡Despidamos el 2020 acatando las normas de higiene para salvar vidas!