El Gobierno departamental de Sucre designó mediante encargo a los gerentes de los hospitales de II nivel Universitario de Sincelejo, y regional de San Marcos, al ser levantada la intervención forzosa por parte de la Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud).
Mediante decreto 0371 de agosto 3 de 2022, el gobernador (e) de Sucre, Fabian Pérez Pérez, designó como gerente encargado del Hospital Regional de II nivel del municipio de San Marcos, a Fariel Emiro Medina Duque, actual subgerente científico de la entidad. Este tomó posesión del cargo este lunes.
La gerente interventora saliente Liliana Patricia Varón procedió a hacer el empalme y entrega de los bienes y haberes de la ESE de II nivel de San Marcos al nuevo administrador.
Asimismo, mediante decreto 0372 de agosto 3 de 2022, el gobernador de Sucre (e) designó por encargo como nuevo gerente del Hospital Universitario de Sincelejo a Pedro Luis Chavez Bueno, actual subgerente asistencial, quien recibió de la agente especial interventora saliente Inés Loaiza Guerra, los bienes y haberes del ente hospitalario.
Situación actual de los hospitales.
La Superintendencia Nacional de Salud, intervino el Hospital Universitario de Sincelejo, (HUS) el 16 de mayo del 2019, cuando este se encontraba en estado crítico.
Presentaba graves problemas de liquidez por deudas que rondaban los $3.480 millones al personal de planta, y pasivos totales por $84.395 millones; la cartera estaba alrededor de los $38.895 millones y la baja facturación se mantuvo en un promedio mensual de $2.300 millones.
Tras el proceso de intervención, registra una mejor prestación del servicio de salud; aumentó la facturación, pasando de $2.300 millones a $4.111 millones en su pico más alto, y en esta misma línea aumentó el recaudo, pasando de $21.396 millones a $ 27.850 millones.
En el caso del hospital regional de San Marcos, la intervención inició el 18 de marzo del 2020.
Según el balance presentado por la Supersalud, este aumentó la capacidad instalada, la compra de 191 equipos biomédicos, la adquisición de mobiliario hospitalario por $1.200 millones y la apertura de los servicios de dermatología, otorrinolaringología, urología y laboratorio clínico.
En lo que se refiere a los factores financiero y administrativo, antes de la intervención, la facturación mensual era de $700 millones y ahora asciende a más de $1.680 millones; el recaudo pasó de $900 millones mensuales en 2020 a $1.323 millones en la actualidad. Los pagos de salarios y de aportes a seguridad social de la operación corriente se encuentran al día.
Desde que fue intervenido el hospital recibió recursos por cerca de $6.000 millones. De estos, $2.899 millones han sido de cartera recuperada en las mesas de flujo de recursos y los acuerdos de conciliación convocados por la Supersalud entre el hospital y las EPS, y los otros $3.005 millones corresponden a asignaciones directas que ha realizado el Gobierno Nacional.
