La tasa de seguridad y convivencia ciudadana, aprobada mediante ordenanza de la Asamblea departamental, comienza a regir en Sucre a partir de este año.
Esta tiene por objeto captar recursos que serán invertidos en el fortalecimiento y dotación de la fuerza pública de elementos necesarios para la protección de la ciudadanía, infraestructura y tecnología de última generación.
Los usuarios de estratos 1, 2 y 3 no pagarán esta contribución; así mismo, los comerciales del servicio de energía cuyo consumo mensual se encuentre en el rango 0 -1000 kw/h; usuarios industriales cuyo rango de consumo mensual se encuentre en el rango 0 -2000 kw/h y áreas comunes de inmuebles sujetos a propiedad horizontal.
También estarán exentas de cobro las residencias, cuyo propietario sea titular de algún establecimiento comercial registrado ante la Cámara de Comercio de Sincelejo.
El aporte de los diferentes sectores será: el estrato 4, $14. 523; estrato 5, $21 784, y estrato 6, $29. 046.
En el caso de los usuarios residenciales será recaudado por Afinia (Caribe Mar de la Costa), y en el de los suscriptores comerciales e industriales, por los operadores que tienen presencia en Sucre.
El primer recaudo de este impuesto fundamental para el fortalecimiento de la seguridad del territorio sucreño será a partir del cobro del consumo del mes de enero de 2022.
La contribución de los estratos altos y sector comercial generará un recaudo aproximado de $13 mil millones por año, según lo ha dado a conocer el Gobierno departamental de Sucre.
Los recursos serán invertidos en el Plan Integral de Seguridad y Convivencia Ciudadana, que es la herramienta que facilita la construcción y formulación de acciones para atender las problemáticas que afectan la seguridad en este departamento.