En medio de escenas de dolor fue sepultado Cristóbal Bedoya Hernández, el patrullero cordobés asesinado en el corregimiento El Tres, jurisdicción del municipio de Turbo, junto a su compañero Walter Osorio Doria, cuyos familiares también residen en la zona del bajo Sinú.
Sus compañeros de la institución le rindieron un homenaje póstumo al uniformado que llevaba 15 años de servicio en la Policía Nacional, tiempo en el cual había logrado acumular 23 felicitaciones por su buen comportamiento y su efectividad en el servicio.
El cuerpo sin vida llegó al aeropuerto Los Garzones de Montería, donde estuvo presente el comandante de la Policía Metropolitana, coronel Fredy Ahumada, quien lideró la calle de honor y dio personalmente las condolencias a sus familiares.
Aunque todavía no se han identificado a los autores del crimen, los familiares del patrullero pidieron a las autoridades celeridad en las investigaciones. La primera hipótesis que se maneja es que pudo haberse tratado de una retaliación por parte del Clan del Golfo, banda criminal que opera en el sur de Córdoba y en la zona del bajo Cauca.
