El municipio de Villanueva y el corregimiento de Algarrobo, norte de Bolívar, están incomunicados.
Así lo informaron los agricultores y finqueros que residen en la zona, quienes explicaron que, tras los aguaceros de los últimos días, el arroyo Tabacal se creció y arrasó con un terraplén provisional que se construyó después de haberse desplomado gran parte el puente de concreto.
Cabe recordar que lo que separaba a las dos poblaciones era ese puente de concreto, construido hace unos veintes años, el cual, al parecer, nunca recibió mantenimiento.
Como consecuencia, los aguaceros lo fueron desestabilizando hasta que se derrumbó, aproximadamente, un 50% de la estructura, por lo cual la Alcaldía clausuró con cintas restrictivas lo que quedaba del concreto y abrió un terraplén para que pasaran las bestias, las motos y algunos camiones.
Pero los agricultores avizoraron que, con la llegada de la temporada invernal, el terraplén no soportaría la fuerza de las corrientes del arroyo, y el pronóstico terminó por cumplirse.
Tras la pérdida del terraplén, a los campesinos les toca hacer transbordos: quienes van de Algarrobo hacia Villanueva, pagan un vehículo hasta el arroyo, donde los espera otro automotor que los llevará a su destino. La misma operación se hace en sentido contrario, lo que implica más costos para movilizarse.
Jorge Palacios Gómez, secretario de Gobierno del municipio de Villanueva, aseguró que en cuanto se conoció el percance su despacho se comunicó con el contratista y con Cardique, para que reconstruyan el terraplén, y que al mismo tiempo inicien las obras de reconstrucción del puente afectado, “puesto que las lluvias van a seguir y el terraplén no es una solución definitiva”.
