Los emprendedores rurales de Córdoba también tuvieron su propia feria de oportunidades, con el fin de mostrar los resultados de los negocios, apoyados por el Departamento de Prosperidad Social.
Los participantes, que forman parte de un proyecto denominado Mi negocio, se dieron cita en las instalaciones del Sena de Córdoba con el fin de mostrar los productos que surgieron de su iniciativa empresarial a entidades del sector educativo y microfinanciero con el fin de que los emprendedores sigan fortaleciendo sus unidades productivas.
Luz Edith Pérez, de la Avícola Contrapunto, ubicada en el municipio de Los Córdobas, y que resultó beneficiada con el programa Sena Emprende Rural, destacó que gracias a esta entidad, un total de 18 mujeres mejoraron su calidad de vida. "Somos 18 mujeres que montamos una unidad productiva que consta de 80 gallinas y en promedio recogemos al día 70 huevos, pero nuestra meta es seguir creciendo", indicó.
En este mismo sentido se pronunciaron Octaviana Ospina Bravo e Hilda Román Acosta, quienes son las propietarias del restaurante Típico del Sinú, en el municipio de Tierralta. "Primero nos capacitamos en el Sena en el área de cocina y en la actualidad estamos sacando a nuestras familias adelante con la venta de pasteles de cerdo, de masa, de arrozs y comidas típicas de la región", puntualizaron.
Por su parte, el director del Sena en Córdoba, Víctor Ariza Palma, anotó que con el programa Sena Emprende Rural se busca promover la generación de ingresos para la población rural, a través de acciones de formación para el desarrollo y fortalecimiento de capacidades y competencias, así como el acompañamiento de las iniciativas productivas rurales orientadas al autoconsumo, los negocios rurales y/o la creación empresa.
Por su parte, funcionarios de Prosperidad Social, indicaron que el programa Mi Negocio cumple el sueño de los colombianos de tener su propia empresa. Explicaron que inicia con la capacitación del futuro empresario a través de talleres en temáticas empresariales para construir un plan de negocio estructurado, luego contempla la capitalización de los negocios con la compra de maquinaria e insumos y finaliza con un proceso de acompañamiento personalizado que busca brindar asistencia técnica a la medida para velar por el funcionamiento de los negocios en el tiempo.