En Montería se instalarán 11 cámaras de fotomultas, con el fin de disminuir el índice de accidentalidad que se ha venido registrando en la ciudad.
De acuerdo con lo señalado por el secretario de Tránsito de Montería, Julio Lora Hernández, los dispositivos de detección electrónica se vienen gestionando desde el año 2019, pero el proceso se había frenado por la pandemia.
Explicó que siete estarán ubicados en el sector urbano y cuatro en la zona periurbana y que antes de su montaje serán socializados con la comunidad para que sepan dónde estarán ubicadas.
Los sitios definidos para su montaje son los semáforos de la calle 68 con Circunvalar, 41 con carrera segunda, calle 29 con carrera quinta, calle 44 con carrera cuarta, calle 22 con Avenida Circunvalar, carrera 29 con transversal 29 y calle 41 con Avenida Circunvalar.
También ubicarán cuatro en puntos como a la altura del kilómetro 46 de la vía que de Montería conduce a Planeta Rica, en el kilómetro 60 en la vía que de Montería conduce a Arboletes, frente a Fedearroz entre Montería y Cereté y un último en el segundo anillo vial, a la altura del colegio Gimnasio Campestre.
El anuncio generó polémica en Montería, pero las autoridades de tránsito han señalado que se trata de buscar mecanismos que garantices un mayor respeto por las señales de tránsito, pues los graves accidentes que se han registrado en Montería, la mayoría con motocicletas involucradas, tienen que ver con la imprudencia de conductores.
Ante las duras críticas, el alcalde de Montería, Carlos Ordosgoitia, indicó que se revisará el otrosí del convenio, a partir del cual la administración municipal está obligada a la implementación de cámaras de fotodetección en algunas vías locales.
“He ordenado al secretario de Tránsito y a la Oficina Jurídica revisar legalmente el otrosí firmado en el 2019, que obliga al municipio a instalar las cámaras de fotodetección y avanzar, solamente, en la pedagogía”, expresó el mandatario.
Cabe recordar que la firma del convenio con el concesionario Movai se hizo años atrás. “Este es un contrato que estaba ya listo en el 2018, y que se firma el otrosí en el en 2019, incluso se iban a instalar en noviembre de 2019, un mes antes de nuestro gobierno. Es una herencia del gobierno anterior”, manifestó el alcalde.
Agregó que el contrato fue suscrito y el no cumplimiento expone a una fuerte sanción económica y a una demanda en la que se corre un riesgo de un fallo adverso a los intereses del municipio.
Reciba noticias de El Universal desde Google News Aclaró el mandatario que está comprometido con la seguridad vial y todas las medidas están direccionadas a salvaguardar la integridad y la vida de peatones y conductores, para disminuir las muertes en accidentes fatales. “Socializaremos con los todos sectores sociales la implementación de las cámaras salva vidas, escucharemos las voces de los actores viales”, expresó.
Posición del Concejo
Por su parte, el Concejo de Montería está apurando la instalación de las fotomultas e incluso, citaron a un debate de control político a la firma encargada del proceso.
Billy Soto, presidente de la Corporación, radicó un proposición con el fin saber por qué los sistemas de fotomultas no entraron a funcionar en su momento, si debían estar listos en 2019.
"La proposición que se radicó tiene por fin citar al Secretario de Tránsito Municipal, a su equipo jurídico, a la gerente de la concesión Movai y al representante legal de ésta, para que nos expliquen por qué los sistemas de fotomultas no entraron en vigor en noviembre de 2019", precisó Soto, aduciendo que se necesitan para sitios de alta accidentalidad.
Accidentalidad en Montería
En la capital cordobesa, de acuerdo con las estadísticas de la Policía de Tránsito, la accidentalidad subió un 32 % entre el 1 de enero y el 13 de marzo de 2022, comparado con el período 1 de enero a 14 de marzo de 2021.
Se indicó que pasó de 65 casos el año pasado a 86, este año y en cuanto a muertes, pasó de 15 en el mencionado periodo evaluado en 2021, a 16 este año, con un aumento de 7 %, mientras que los lesionados aumentaron en un 21 %, pasando de 85 a 103 personas.
