El resurgir de los grupos armados en los Montes de María tiene atemorizados a los habitantes de los 15 municipios de Bolívar y Sucre que hacen parte de esta subregión. Solo en 2022 se presentaron 102 homicidios y para este año, teniendo en cuenta que se viene la época de elecciones, temen que la cifra suba.
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Es por esto que desde hace un tiempo los Consejos Territoriales de Paz, Reconciliación, Convivencia y No Estigmatización de los Montes de María vienen pidieron una reunión con el Estado, con el fin de poner de manifiesto sus necesidades y poner fin a la zozobra que hoy tienen por cuenta de la situación de orden público.
Dicha reunión por fin se llevó a cabo el 14 de marzo con un delegado de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, representantes de la sociedad civil, y con el acompañamiento del Instituto Internacional de Estudios del Caribe de la Universidad de Cartagena. Sin embargo, los Consejos Territoriales de Paz no salieron conformes de la reunión, pues aseguran que en dicho encuentro no se concretaron acciones para mejorar la grave situación que hoy padecen los Montes de María.
“No hubo claridad por parte del delegado de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz sobre cuál sería su rol frente a la actual situación de orden público, seguridad y derechos humanos en Montes de María. Es decir, no hubo acuerdos o acciones concretas más allá de articular con otras entidades e instituciones de alto nivel como el Ministerio del Interior y otras dependencias, tampoco posibles apoyos a la problemática territorial, ni se comprometió con una visita del comisionado Danilo Rueda a la subregión para escuchar de manera directa a los Consejos Territoriales de Paz”, dijeron los Consejos a través de un comunicado a la opinión pública.
En su pronunciamiento también afirmaron respaldar los esfuerzos del Gobierno nacional para alcanzar la Paz Total, sin embargo, exigieron acciones para poder dar solución a la problemática de orden público. “Solicitamos de manera urgente un plan de choque y un Puesto de Mando Unificado para controlar las acciones criminales del Clan del Golfo y demás grupos armados organizados en Montes de María”, manifestaron.
Igualmente pidieron blindar el territorio para la próxima contienda electoral, con el fin de que se garantice el derecho a la participación política. Además, solicitaron que sea el mismo Alto Comisionado de Paz, Danilo Rueda, quien escuche de manera directa los requerimientos de la comunidad.
La situación en Montes de María
Los Consejos Territoriales de Paz, Reconciliación, Convivencia y No Estigmatización de los Montes de María aseguraron que la expansión territorial del Clan del Golfo y bandas locales asociadas han creado temor, angustia e incertidumbre en la comunidad, debido a la creciente inseguridad y la vulneración de derechos humanos, económicos, sociales, políticos y culturales.
“Su control territorial se expresa en imponer normas de conductas sociales, regular la entrada y salida de algunas zonas rurales, y la resolución de conflictos entre vecinos reemplazando la administración de justicia”, manifestaron.
Los consejos también denunciaron amenazas a líderes indígenas, representantes de organizaciones sociales y miembros de la comunidad LGTBIQ+. Estas amenazas también se han trasladado a alcaldes y funcionarios con el fin de que no hagan presencia en las zonas rurales. A su vez, dijeron que en algunos municipios varias obras públicas han presentado retrasos en su ejecución por el no pago de extorsiones a los grupos armados.
A esto también se suma el reclutamiento de menores. “Ofrecen trabajo a jóvenes con un salario de un millón de pesos en las zonas rurales y barrios periféricos como una nueva modalidad de reclutamiento en el territorio”, puntualizaron.
Por otro lado, también se puso de manifiesto los efectos negativos que han producido las exploraciones de gas y petróleo por parte del Bloque Sinú – San Jacinto, que según un estudio realizado por el Instituto Internacional de Estudios del Caribe de la Universidad de Cartagena, con base en datos de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ha provocado que desde el 2017 municipios como El Carmen de Bolívar, San Jacinto, San Onofre, Toluviejo, El Guamo y Zambrano, presenten vulnerabilidad media en cuanto a la demanda de agua; mientras que Marialabaja, Ovejas y Zambrano tiene un riesgo alto.
En este sentido, lo que piden desde los Montes de María es que exista un plan para solventar estas necesidades y principalmente garantizar la seguridad de la población.
