¿Alguna vez sintió que no le veía sentido a las clases de química que recibía en el colegio?, para enfrentar esa sensación, que aún perciben muchos estudiantes, la profesora Sandra Zabaleta, de la Institución Educativa Docente de Turbaco, quiso articular la cotidianidad, la química y la lectoescritura para fortalecer la afinidad de sus estudiantes.
Postuló su proyecto al IV Premio Nacional Docente BBVA y fue una de las ganadoras, entre mil proyectos de docentes que trabajan por hacer de la lectura y la escritura la razón de ser de los estudiantes.
La química en el contexto es el nombre del proyecto de la docente, y a través de él los estudiantes piensan la química desde el significado que tiene en el mundo real.
“¿Quién de nosotros no ha observado cómo se oscurece una manzana cuando la partimos, cómo crece la harina cuando se mezcla con levadura, cómo se oxida un clavo?, ante estas situaciones cotidianas, pocos somos conscientes de los procesos físicos o químicos implicados”, comentó la profesora Zabaleta.
“A partir de allí, los estudiantes exploran fenómenos cotidianos con la mirada de un científico, se asombran frente a las observaciones y descubrimientos; estudian sus compuestos, transformaciones y aplicaciones en el contexto (salón de belleza, taller de mecánica, panadería, cocina), y la importancia que tiene en el funcionamiento de su cuerpo”, explicó.
Con la estrategia, los estudiantes parten de la observación de una reacción, analizan una situación problema y luego buscan la explicación científica del suceso leyendo documentos científicos relacionados con la temática, fortaleciendo así sus competencias científicas básicas y comunicativas en lectoescritura.
“Esto se evidencia en la redacción de sus ideas, producción textual, lectura de imágenes, gráficos y comprensión de documentos científicos. Han mejorado su fluidez verbal y argumentación, así como la reflexión crítica frente a situaciones del contexto”, detalló la docente.
El premio
Además de Sandra, resultaron ganadores docentes de Buga, Valle del Cauca, Bogotá y Antioquia.
Como parte del premio, la docente hará una pasantía en la Feria del Libro de Lima, Perú, y recibirá 500 morrales con útiles escolares para sus estudiantes.
