Para algunos la lluvia puede ser una gran bendición, pero para otros es una tragedia, más cuando cae en abundancia. Y es justamente esto último lo que han estado viviendo cientos de familias de la región Caribe desde el fin de semana, cuando comenzaron las fuertes lluvias debido al paso de una onda tropical por el mar Caribe.
“El agua se nos metió y nos llegó un poco más arriba de las rodillas, nos tocó correr a subir los electrodomésticos y gracias a que habíamos hecho unos muros en la entrada, no se metió más, así como ocurrió el aguacero pasado, donde el agua nos llegaba a los hombros”, dijo Yira, residente del sector El Bajo en Turbaco, donde la cuneta se desbordó debido a la fuerte lluvia que cayó en la noche del lunes. Lea aquí: 352 familias afectadas por inundaciones en Montería
“Todo se veía muy feo, el agua pasaba muy rápido y como la cuneta se quedó pequeña debido a todas las construcciones que han hecho en la zona, buscaba por dónde salir y al no tener opciones se metía a las casas. Esta no es la primera vez que esto pasa, siempre somos los afectados y no nos solucionan”, comentó.
En este mismo sector reside Julia, quien cuenta que en su calle, debido al alto nivel que alcanzó el agua, algunos niños tuvieron que salir de sus casas amarrados en cabuyas para evitar que la corriente se los llevara.
“Nosotros queremos que la Alcaldía o la Oficina de Gestión de Riesgo nos ayude, no podemos estar inundándonos cada vez que llueve, hace años esto no pasaba aquí. Tener que perder muchos de nuestros electrodomésticos por las lluvias no es justo”, aseguró Julia, mientras Yira añade que: “Varias familias tuvieron la oportunidad de hacer un muro de contención frente a sus casas justamente para evitar las inundaciones, pero a veces ni eso ayuda”.
Las fuertes lluvias que cayeron en la noche del lunes también provocaron que el arroyo de Bonanza se desbordara afectando la movilidad en sentido Turbaco a Arjona y viceversa, en la Troncal de Occidente. Lea aquí: ¡Atención! Se desborda arroyo en Bonanza, Turbaco
“Ese arroyo nunca se había desbordado, es la primera vez que vemos algo así y las autoridades locales no hacen acto de presencia”, comentan algunos residentes.
Otros barrios afectados en Turbaco por las lluvias son Los Ciruelos, El Recreo, Fátima, Bosconia, Las Islas y La Canalita, entre otros.
“Hemos estado trabajando en un censo para conocer las afectaciones que dejó la lluvia en Turbaco y en Cañaveral, donde nos reportaron algunas inundaciones también”, explicó Cleiver Padilla, comandante de bomberos del municipio.
Yira, habitante de Turbaco.
Según el Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas del Caribe (CIOH), las lluvias se podrán acentuar en los meses de septiembre, octubre y noviembre, por esto las autoridades locales en conjunto con la Presidencia de la República, han estado al tanto de las afectaciones para ayudar a la población.
Recordemos que los municipios de Achí, Pinillos y San Jacinto del Cauca fueron los primeros afectados por las lluvias debido al desbordamiento del río Cauca, dejando centenares de hectáreas de cultivos anegados y miles de familias sin un hogar.
Solo en San Jacinto del Cauca, hasta el lunes en la mañana, había 350 familias afectadas y 7 mil hectáreas de cultivos perdidas. La Gobernación de Bolívar ha estado al frente de esta situación y con apoyo de las autoridades nacionales, acordaron construir un dique en La Mojana para evitar que se sigan presentando este tipo de inundaciones.
La Oficina Asesora de Gestión del Riesgo de Desastres de la Gobernación de Bolívar y la Alcaldía de Achí, llevaron a 115 familias afectadas del corregimiento de El Rosario, mercados, subsidios de arriendo, colchonetas, kit de aseo y cocina, sacos big bag, zapatos, ropa, sábanas y juguetes para los niños. Lea aquí: En Achí, sur de Bolívar, aprendieron a vivir con los muebles flotando
José Ricaurte, director de Gestión de Riesgo de Desastres de Bolívar, señaló que están atendiendo a la comunidad de El Rosario y se les están brindando ayudas humanitarias y todo el apoyo psicosocial para que puedan tener una reubicación adecuada. “Se les ha dando todo el apoyo con las autoridades y el alcalde municipal, para que puedan superar esta situación que están viviendo”.
Ricaurte explicó que siguen acompañando a las familias afectadas en San Jacinto del Cauca, donde el desbordamiento del río Cauca en el sector Cara e’ Gato ha dejado como resultado a más de 230 familias evacuadas de sus veredas inundadas. De esas, 23 han sido refugiadas en un albergue provisional en la institución educativa del corregimiento Bermúdez.
“Luego de llegar al territorio, en articulación con la administración municipal y la presencia de los organismos de socorro dentro del proceso de coordinación, se designó como entidad de apoyo a la Cruz Roja para San Jacinto del Cauca y a la Defensa Civil a Ayapel en sus albergues. Así mismo brindamos asistencia técnica y verificación en el cumplimiento de la declaratoria de calamidad y construcción del plan de acción que conlleve al retorno de la normalidad”, finalizó.
El defensor del Pueblo, Carlos Camargo, le solicitó al Fondo Adaptación adoptar las medidas necesarias para construir las obras correspondientes para evitar que se sigan presentando inundaciones en La Mojana (Bolívar).
“Esta situación requiere una solución de fondo, ya que solo en los municipios sucreños de San Benito, Caimito, Sucre, San Marcos y Guaranda, ya han resultado damnificadas cerca de 30.000 personas, de las cuales cerca de 1.700 habitantes de 500 familias permanecen en albergues temporales en este último municipio”, destacó el Camargo.
El defensor del Pueblo advirtió, además, que la problemática regional tiene un impacto nacional, al hacer parte La Mojana del complejo de humedales de la depresión momposina que sirve de escudo ambiental a la Costa Caribe contra las inundaciones.
“La pérdida de capacidad de almacenamiento de agua en este sistema de ciénagas es consecuencia en gran parte por la sedimentación que surge de la explotación minera en Antioquia, lo que también nos lleva a un urgente llamado de atención a las autoridades para regular y controlar esta actividad”, puntualizó.
José Ricaurte, Director de Gestión de Riesgo de Desastres de Bolívar.
La situación en el municipio de Guaranda en Sucre es similar a las demás, según el censo realizado a corte del 30 de agosto, hay 592 familias afectadas por el río Cauca, equivalente a más de 1.700 personas.
Cina Cardozo, coordinadora de la Defensa Civil en Guaranda, informó que esperan terminar el censo en los sectores más afectados por las inundaciones. Estos están siendo notificados a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres.
Aunque el nivel del río Cauca ha bajado en Guaranda y no está entrando agua a la zona urbana, las familias se encuentran en albergues temporales ubicados en instituciones educativas y la Casa Cural de la parroquia.
Las autoridades locales anunciaron que una vez baje el agua completamente, se procederá a inspeccionar el estado de las viviendas, así como la fumigación y limpieza de las zonas afectadas, a fin de determinar si se encuentran habitables para que las familias retornen a sus hogares.
Las inundaciones actualmente se presentan en la zona de Rabón, en el corregimiento de Gabaldá, Nueva Esperanza, El Humo, Las Parcelas, entre otras, en donde la emergencia se registra a raíz del rompimiento del río Cauca en Cara e’ Gato en San Jacinto del Cauca.
El gobernador de Sucre, Héctor Olimpo Espinosa, lanzó un SOS por La Mojana y dijo que más de 500 mil habitantes de toda la región necesitan de la solidaridad nacional, debido a las cientos de familias afectadas y agricultores que han perdido sus cultivos, principalmente de arroz.
Debido al desbordamiento del río Cauca, en Ayapel, Córdoba, 15 mil personas están siendo evacuadas.
Una de ellas es el campesino Juan Cuadrado, de 52 años, quien no pudo evitar sus lágrimas al ver sus cultivos debajo del agua mientras subía a la canoa de madera que lo llevaría a un sitio seguro.
“Tenía las esperanzas puestas en este cultivo, pensé que así podría recuperarme de la crisis económica, pero ahora pasó esto”, comentó con tristeza, mientras su esposa y sus tres hijos lo acompañan y abrazan.
De acuerdo con lo señalado por el alcalde de Ayapel, Isidro Vergara, la situación en el municipio es crítica y se agrava si se tiene en cuenta que hasta el momento hay 2.500 hectáreas de arroz bajo el agua.
Explicó que serían 11 las poblaciones que se afectarían si la situación no se controla en el menor tiempo y las más afectadas serían Majagual y Guaranda, en el vecino departamento de Sucre.
Vergara insistió en que si el Gobierno pone todo el empeño y el músculo financiero que se requiere, las obras de contención se podrían hacer en 30 días y no en cuatro meses como están planeadas, tiempo en el que les tocaría mantener a los afectados en albergues en el casco urbano y no hay recursos para ello.