Desde la irrupción tecnológica de las redes sociales, las aplicaciones y la inteligencia artificial, el juego político y las lógicas electorales dieron un giro de 180º. La vanguardia en este ámbito ya no se filtra tanto en las paredes, vallas publicitarias o folletos entregados en las esquinas, sino en los entornos digitales. (Lea: ¿Quién pagó la multa que inhabilitaba a Judith Pinedo para aspirar?)
Por consiguiente, un buen escenario para seguir cómo están gastando recursos los aspirantes a la Alcaldía de Cartagena y, en algunos casos, sin respetar los plazos para hacer campaña, según el cronograma de la Registraduría Nacional, es el Informe de la biblioteca de anuncios de Meta, conglomerado tecnológico propietario de Facebook, Instagram, WhatsApp, entre otras plataformas.
Este informe de acceso público forma parte de las iniciativas de Mark Zuckerberg para fomentar la publicidad transparente en su imperio. Esta biblioteca explora, filtra y descarga datos de anuncios sobre temas sociales, elecciones o política. Consulta el gasto total general y el gasto por anunciante y ubicación geográfica.
Cabe recordar que la Registraduría tiene restricciones claras para la realización de campañas políticas antes del tiempo estipulado. Solo desde el 29 de julio, tres meses antes de las elecciones (29 de octubre), es que se puede hacer propaganda electoral en el espacio público. Actualmente, solo pueden hacerla los precandidatos que van por firmas, inscritos por Movimientos Significativos de Ciudadanos.
En el caso de la propaganda en medios de comunicación y entornos similares, solo se podrá hacer desde el próximo 2 de agosto. Por ende, sin tener este medio de acusar a nadie, hay aspirantes que ya hacen uso de las redes sociales para propiciar sus objetivos electorales. Así está la cosa:
Así está el gasto en anuncios de aspirantes a la Alcaldía de Cartagena, según Meta:
Del anterior listado sorprende la ausencia del candidato Dumek Turbay, pues es de los de mayor reconocimiento en la región, el más opcionado según encuestas criticadas y cuenta con una alta presencia en redes. En la misma línea, William García Tirado, otro “peso pesado” en la contienda electoral, no ha gastado aún en Meta.
Ninguno tiene descargo de responsabilidad
Facebook quiere que haya más transparencia y autenticidad en la publicidad que se realiza en su plataforma, especialmente en asuntos sensibles o que estén sometidos a un continuo debate como es la política. Por este motivo, Meta insta a tramitar una autorización y utilizar descargos de responsabilidad en los anuncios.
“Debes hacerlo si la persona es o fue candidata a un cargo público. Los anuncios que hagan referencia a una persona que es o fue candidata a un cargo público debería incluir un descargo de responsabilidad, y eso incluye a las personas que no estén participando activamente en una elección”, indica Meta como un ideal en este tema.
El Consejo Nacional Electoral decidió que si bien el uso de las redes sociales es considerado como un derecho a la libertad de expresión, información y comunicación, también lo es la libertad de elegir y ser elegido y la igualdad de los candidatos y agrupaciones políticas que participen en los procesos electorales.
Por lo tanto, el CNE sigue las publicaciones que hagan las agrupaciones políticas y tomará las medidas pertinentes si incumplen las normas de propaganda electoral con contenido en Facebook, Twitter e Instagram, para promover candidaturas a cargos o a corporaciones públicas de elección popular.
“Hacer publicidad política en estas redes en época prohibida sí compromete la conducta de los candidatos. La propaganda únicamente podrá realizarse en medios de comunicación 60 días antes de la votación, y en espacio público 3 meses antes”, aseveraron.
Estas restricciones tienen como objetivo garantizar la equidad en las elecciones, evitar el abuso de poder y la manipulación de la opinión pública por parte de los candidatos y sus partidos políticos.
