El primero de enero, cuando tome posesión William Dau Chamat como alcalde de Cartagena, es probable, y debería ser así, que se conozcan los nombres definitivos de quienes lo acompañarán en su gabinete.
Así lo hicieron los exalcaldes Campo Elías Terán, Manolo Duque y los elegidos en atípicas Dionisio Vélez y Antonio Quinto Guerra.
Para un sector, el hecho que Dau no haya designado personas y no llegue rodeado de secretarios el día de su posesión es sinónimo de transparencia y algo que lo deslinda de las casas políticas. Mientras que otros consideran que es sinónimo de debilidad y de falta de organización.
Hasta el momento, lo que sabe es que el proceso de escogencia se hará a través de un empresa cazatalentos de Cartagena.
El propio Dau Chamatt ha revelado que en las funciones de primera dama estará su jefe de campaña, la administradora de empresas Cynthia Pérez, una de sus personas de confianza.
Esta función no tiene un nivel de secretaría, pero se cree que el alcalde Dau lo hará a través de una asesoría u orden de prestación de servicios.
Dos personas más que estarián en el gabinete de Dau son la exaspirante al Concejo y exgerente de la campaña de Gustavo Petro en Cartagena, Lidys Ramírez, y el exaspirante a la Alcaldía de Cartagena, por la Alianza Verde, Armando Córdoba.
Ramírez fue delegada actualmente por Dau para que sea el enlace entre él y líderes que lo apoyaron, para poder establecer perfiles para el proceso de empalme y el recurso humano que le acompañaría.
Sobre Córdoba, lingüista y literato de la Universidad de Cartagena, se cree que podría estar al frente de entidades como el Instituto de Patrimonio y Cultura, la Escuela de Liderazgo, o la Secretaría de Participación y Desarrollo Social.
Marlon Madiedo, abogado experto en la función pública, opina a su vez que “es probable que un perfil como el de Armando Córdoba califique para una secretaría como la de Educación, pero que representa un gran compromiso y habilidades; recordemos que está dependencia junto con salud manejan los mayores recursos en el Distrito”.
“Por eso no creemos que Córdoba sea designado para esta secretaría, un monstruo que ha sido permeado por las casas políticas por los recursos que maneja; hay que también anotar que en las reuniones de empalme se ha visto a personas como Julio Alandete y Jaime Amín, ambos exsecretarios de Educación del Distrito; el primero de ellos con excelentes resultados durante el gobierno de Judith Pinedo”, apuntó Madiedo.
Algunos comentan que miembros del Centro Democrático en Cartagena podrían tener participación en el gobierno de Dau, como el exalmirante Gabriel Arango Bacci y Luis Guillermo Otoya, debido a su cercanía con Dau. A ambos se les ha visto en las jornadas del comité de empalme, aunque la jefa del empalme de Dau, Irina Saer, ha sido enfática en señalar que han recibido apoyo de distintas personas, y que ello no implica que estas acompañarán en el gobierno a Dau. Otoya, como se recordará, fue director de Distriseguridad.
“A través de sus redes sociales, en una forma de gobernar distinta como parece que será su estilo, Dau ha anunciado que busca perfiles como abogados, ingenieros, en fin profesionales de todas las áreas, creemos que eso puede servir a la hora de conformar un gabinete, pero requiere de una metodología”, apuntó Madiedo.
Pero la meritocracia, que es modelo que plantea el gobierno de Dau, para el sector público debe tener unos elementos adicionales, que no los tiene el sector privado, algo así como unos valores agregados.
La oficina de la Función Pública ha señalado que los funcionarios deben tener competencias en aspectos como “la compra pública, control interno, defensa jurídica, gestión documental, gestión financiera, gestión de servicios administrativos, gestión del talento humano, gestión tecnológica, planeación estatal y servicio al ciudadano del sector público”.
Se trata de “un modelo de empleo público que se sustenta en competencias, y entra a complementar lo dispuesto en el Decreto 1083 de 2015 en lo referente a las competencias comportamentales de todos los niveles y de todos los servidores públicos”.
Otro de los elementos que debe garantizar un gabinete es la sostenibilidad y la permanencia.
Así las cosas, habrá que esperar cómo se desarrolla el proceso de conformación del gabinete de William Dau para sus cuatro años.
