Para nadie es un secreto que la relación entre el alcalde de Cartagena, William Dau, y el gobernador de Bolívar, Vicente Blel Scaff, no pasa por su mejor momento, esto a raíz de un comentario que el gobernador hizo el viernes en el PMU realizado en el Centro de Convenciones, debido a que el alcalde no se quedó al almuerzo con empresarios y con la ministra del Interior, Alicia Arango.
Después de conocerse la razón por la que Dau prefirió no quedarse para este encuentro, el gobernador volvió a tomar la vocería e indicó que “ante la creciente ola de atracos y de sicariatos que se vive en la ciudad de Cartagena, convocó con carácter de urgencia al alcalde Mayor de Cartagena, al secretario de Interior, Armada, Policía, Ejército, Fiscalía y demás autoridades a un consejo extraordinario de seguridad para tomar acciones contundentes contra la delincuencia que azota a la ciudad”.
Esto no fue bien recibido por la Alcaldía Mayor de Cartagena, que a través de un comunicado indicó que “recibimos con extrañeza la convocatoria del gobernador de Bolívar, Vicente Blel Scaff a un consejo extraordinario distrital de seguridad y convivencia, desconociendo y excediendo sus competencias constitucionales y legales. Las competencias de las entidades territoriales, se desarrollan bajo los principios de coordinación, concurrencia y subsidiariedad, la ley precisa como se ejercen estas, y para el caso no implica que se afecten otros principios constitucionales del Estado, como lo es la autonomía constitucional de los Distritos”.
En el comunicado también se puede leer que “en materia de normas hay una jerarquización y graduación normativa que se cumplen de acuerdo con los niveles de la autoridad; Nación, departamento, distritos y municipios. Por lo tanto, el gobernador puede expedir ordenanzas o instrucciones para tal fin, pero no soslayar la autoridad del alcalde Mayor en su territorio, específicamente convocando y presidiendo el consejo distrital de seguridad y convivencia, hacer lo contrario, sería un retroceso de los cambios que la Constitución Nacional introdujo”.
Sin embargo, el consejo fue realizado ayer, a las 9 de la mañana, en la sede de la Armada Nacional, donde asistieron de manera presencial y virtual, el viceministro de Defensa, Jairo García; el General Oscar Atehortúa, director Nacional de Policía, los comandantes de Armada, Ejército y autoridades fiscales. Mientras que el alcalde Dau mantuvo su postura y no asistió a este evento, donde se tomaron decisiones sobre la seguridad en Cartagena.
Al finalizar el consejo extraordinario de seguridad, las autoridades participantes concluyeron que realizarán un mayor número de patrullajes en las zonas más críticas de la ciudad, esto con el fin de que los residentes de estos sectores se sientan protegidos al ver a las autoridades patrullando por sus calles, además, hablaron de reforzar el programa de recompensas para estimular la información que lleve a determinar la ubicación y la identidad de los delincuentes.
A su vez, plantearon desarrollar semanalmente juntas de Información y coordinación de acciones de inteligencia entre Policía Judicial y Fiscalía Seccional con reporte a las demás autoridades para el monitoreo de la situación de inseguridad; realizar reunión con Consejo Superior de la Judicatura y ministro de Justicia para agilizar procesos judiciales en Cartagena.
Ante esto, el general Henry Sanabria, de la Policía Metropolitana de Cartagena, explicó que “los patrullajes mixtos que ya se venían desarrollando en los barrios como Nelson Mandela, El Pozón y Pasacaballos, se extenderán a otras partes de Cartagena particularmente en los corregimientos, donde hemos tenido la presencia de personas que, violando las normas sanitarias, han generado hechos de violencia que terminan en lesiones y muerte”.
Respecto a la realización de este consejo de seguridad, el mandatario de los bolivarenses comentó que “escuchamos las peticiones de la ciudad de Cartagena y por eso hicimos un llamado para que concurrieran en este espacio (...) Siempre estaré dispuesto a servir de apoyo al Gobierno Distrital y acompañar las acciones que sean necesarias para aunar esfuerzos en beneficio de la seguridad de la capital de Bolívar”.
El Universal consultó con Armando José Mercado Vega, politólogo y director del Programa de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Tecnológica de Bolívar, a quien le preguntamos si creía que lo ocurrido en los últimos días con Dau y Blel se debía a algo personal y si el gobernador está en la capacidad de organizar un consejo para tratar temas de seguridad de la ciudad.
“Más que un asunto personal, para el alcalde Dau, Vicente Blel representa a las estructuras políticas tradicionales, casas políticas o clanes políticos, responsables por acción o por omisión, de la crisis política que vivió la ciudad por casi 10 años, crisis que además puede estar relacionada con la debilidad institucional que tiene la ciudad en la provisión de bienes públicos básicos- como un sistema de salud eficiente- que tanto se necesita ahora.
Es cierto que el alcalde Dau-como todos los mandatarios- pueden haber cometido errores en la gestión del COVID-19, y que algunos funcionarios claves han renunciado en los últimos meses generando algo de incertidumbre, pero también es cierto que ciertas estructuras políticas tradicionales están tratando de sobredimensionar la situación de Cartagena- que ya es grave- para afectar la gobernabilidad y debilitar su gestión. Por ejemplo, a fecha las cifras en número de casos, fallecidos y tasa de letalidad son peores en Barranquilla que en Cartagena, pero no escuchamos en los medios de comunicación a la clase política tradicional de Barranquilla haciéndole una encerrona al alcalde Pumarejo, ni pidiendo una intervención del Gobierno nacional en el Atlántico para enfrentar la situación del COVID-19”, explicó.
Respecto a si Dau debió o no asistir, indicó que “hay dos escenarios. Los mandatarios locales pueden convocar consejos de seguridad para sus entidades territoriales, es decir, el gobernador puede convocar un consejo de seguridad para el departamento y el alcalde puede convocar uno para el Distrito. Lo que no está claro es qué fue lo que convocó al gobernador. Si fue un consejo de seguridad distrital, efectivamente la normatividad no se lo permite y estaría posiblemente extralimitándose. Pero, si era un consejo de seguridad departamental, y uno de los puntos a tratar en la agenda era la situación de inseguridad de Cartagena, podía hacerlo, e invitar al alcalde, el cual no estaba en obligación de ir. En ese orden de ideas, la información en este sentido no es clara, pues algunos medios hablan de un consejo de seguridad departamental y otros de uno Distrital. Además, en la página de la Gobernación no está colgado el acto administrativo para aclarar estas dudas”.
