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Voto electrónico-restaurante

¿Por qué los gobernantes y sucesivos registradores no han implementado el voto electrónico? Simplemente porque no les conviene, prefieren la facilidad de los fraudes electorales para mantenerse en el poder y seguir con sus maniobras corruptas. En los países vecinos Brasil, Venezuela, Ecuador, Chile, Argentina, Perú, México; las elecciones se realizan mediante el sistema electrónico y así evitan los fraudes.

En Colombia apareció el señor Rodolfo Hernández, un político que desvaría en sus aspiraciones con la corrupción. Cualquier entendido en psicología se percata de que Hernández no está equilibrado mentalmente.

La historia personal de Hernández lo muestra con una habitual tendencia en participar en la corrupción como ha ocurrido en su natal Santander. Usó los cargos para fines protervos. Como la prensa y noticieros radiales se ha desdibujado y olvidaron la ética, no establecen análisis críticos de las intervenciones de personajes como Hernández; que cada vez más en sus peroratas muestra su ausencia de principios éticos. Ojalá las gentes que se acerquen a las urnas en el próximo evento electoral analicen y a la vez castiguen a los oportunistas como el aparecido señor Hernández. Basta con ver en la televisión al candidato de marras para identificarlo como un farsante sin escrúpulos.

LA CALLE REINA. Dedicado al doctor y académico Rafael Ballestas Morales. El magistrado Fabio Morón Díaz era invitado frecuentemente a dictar conferencias en un instituto de Ciencias Constitucionales de Madrid. En uno de esos viajes lo acompañé. Después de cumplidos esos compromisos académicos decidimos buscar un restaurante afamado en la calle Reina 29, era la “Barraca Valenciana”. Pasamos la tarde almorzando a la usanza española: unos cayos a la madrileña, una paella valenciana y un excelente vino español. Finalizada la opípara comida decidí revisar una serie de caricaturas, leyendas escritas en las paredes del restaurante. Eran mensajes de la literatura, la historia y la filosofía y el humanismo. Allí fungían José Martínez Ruiz, Azorín, Eugenio D’Ors, José María Pemán, y muchos otros. Me dirigí a Azorín que fue un crítico que escribió obras sobre El Quijote de Cervantes Saavedra y toda la literatura española con referencia también a la política. Azorín fue cultor de la buena mesa y precisamente en referencia al Quijote y Sancho, hace mención de los Gazpachos y advierte que los hay andaluces y manchegos. Precisamente Azorín menciona que Sancho Panza decía: “Que prefería hartase de Gazpachos a estar sometido a la dieta de un médico impertinente que me mate de hambre”.

Al salir del sitio, el cual no queríamos abandonar por razones obvias, en medio de la penumbra de la tarde, pensábamos que en ese lugar el momento de placer gastronómico, Azorín departía con aquellos personajes y políticos, a los cuales con gracia y sorna involucraba en sus comentarios muchas veces lapidarios. A nuestra memoria acudían varios, pero en especial aquel inclara referencia a un debate en el parlamento español. El señor marqués de los Pilares sigue en pie y hablando... el señor marqués de los pilares sigue en pie y hablando...

*Exdirector de El Universal. Académico de Medicina e Historia.

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