Hoy comienza la inscripción de aspirantes a la Contraloría de Cartagena, con dos antecedentes recientes que evidencian cuán apetecido es el poder de esa entidad.
Por un lado, la Corte Suprema de Justicia investiga al senador liberal Lidio García por su posible participación en una trama corrupta para elegir a la contralora Nubia Fontalvo, en 2016, informó este domingo El Espectador.
García aparece señalado, reiteradamente, en varios documentos que estudia la Corte. En unos audios, dijo el diario capitalino, “concejales y políticos de Cartagena dejaron constancia del presunto entramado criminal” para elegir a Fontalvo. El Tribunal tiene evidencias de 11 llamadas realizadas desde el celular del congresista a Fontalvo, entre enero y marzo de 2016, cuando se celebró su elección. También hay registros de comunicaciones entre García y José Julián Vásquez, poder detrás del destituido alcalde Manolo Duque.
El Consejo de Estado declaró nula la elección de Fontalvo en 2017 y desde entonces no hay contralor titular en Cartagena. Ese vacío tiene en crisis profunda el control fiscal de la ciudad: van tres contralores interinos en año y medio, sin que esté clara la fecha de la elección del titular.
El segundo hecho es la accidentada jornada en la que varios concejales se enfrentaron, esta semana, para designar a Gustavo Núñez como contralor encargado. De 16 habilitados, nueve votaron para reemplazar a Rafael Castillo, cuya salida golpea el poder emergente de la presidenta del Concejo, Gloria Estrada.
De hecho, en la sesión de la semana pasada, el concejal Lewis Montero le dijo a Estrada que había estado dilatando la votación. “Esta vez usted perdió. Usted ganó con los encargos aprobados anteriormente. Ahora acepte su derrota”.
A la concejal Estrada se le vio molesta en esa sesión. Tanto, que intentó cerrarla, pero los demás concejales no lo permitieron, eligieron mesa directiva ad hoc y continuaron sin ella. A la mañana siguiente, Estrada estuvo divulgando, a través de su equipo de prensa, un documento de posible insubsistencia de Núñez, para mostrar que su elección había sido irregular.
Que Estrada hiciera ese lobby ante los periodistas no deja ya ninguna duda de sus nexos políticos con Castillo, señalados públicamente desde hace meses por el alcalde William Dau. El mandatario ha dicho, además, que Castillo es cercano a Lidio García, conexión que ahora tiene asidero con los documentos que investiga la Corte e involucran al senador liberal.
Lo que pase las próximas semanas con la elección del contralor titular disiparará o aumentará las dudas de manejo amañado en la Contraloría, otra entidad pública local con poca confianza ciudadana.
*Cofundadora de La Contratopedia Caribe.
