Su nombre oficial es Estado de Qatar y es protagonista de varias noticias por estos días.
El anfitrión de la Copa Mundial de la Fifa en 2022 parece estar listos para acoger el campeonato futbolístico más importante del planeta, pero no para los cuestionamientos globales sobre las violaciones a derechos humanos y a libertades que en Occidente son básicas para garantizar la dignidad humana.
El Mundial de Catar 2022 comenzará este 20 de noviembre, y para el show inaugural estaban programadas, al parecer, entre otras estrellas mundiales, Shakira, Dua Lipa y J Balvin. Lee aquí: ¡Lo último! Shakira no cantará en el Mundial de Qatar y tiene poderosos motivos
Las dos primeras ya anunciaron su retiro: Shakira lo hizo después de recibir una lluvia de críticas por si quiera contemplar el hecho de actuar en ese país, conociendo las absurdas prohibiciones y castigos contra mujeres y personas homosexuales, etc.
Dua Lipa, entre tanto, dijo que no había sido invitada a Qatar y que, de todas formas, no iría. “Estaré haciéndole barra a Inglaterra desde lejos. Estoy deseando visitar Catar cuando haya cumplido con todos los derechos humanos que prometió cuando ganó el derecho a albergar el Mundial de Fútbol”, puntualizó. Lee además: Dua Lipa reveló por qué se niega a presentarse en el Mundial Catar
¿Pero cuáles son las prohibiciones y sanciones? Veamos
De acuerdo con Amnistía Internacional, “la difícil situación de las personas migrantes que trabajan en Qatar ha sido objeto de amplia difusión desde que la FIFA concedió en 2010 la organización del campeonato a este país. Las personas migrantes y las trabajadoras y trabajadores domésticos siguen sufriendo diversos abusos, como robos de salario, trabajo forzoso y explotación”. Lee además: Mundial Catar, no todo es fiesta: una copa manchada de abusos
Pero este es solo uno de los escenarios de las violaciones de los derechos humanos.
Sobres las mujeres
Las mujeres son discriminadas en Qatar en la ley y en la práctica: necesitan el permiso de su tutor varón —por lo general, su esposo, padre, hermano, abuelo o tío— para contraer matrimonio, estudiar en el extranjero con becas del gobierno, ejercer muchos empleos públicos, viajar a otros países (si tienen menos de 25 años), y acceder a atención de la salud reproductiva.
El derecho de familia discrimina a las mujeres, que tienen más dificultades para acceder al divorcio y desventajas económicas más graves si lo hacen, en comparación con los hombres. Las mujeres también siguen sin tener protección adecuada contra la violencia de género intrafamiliar y la violencia sexual.
Y la población LGBT
El artículo 296.3 del Código Penal de Qatar tipifica como delito diversos actos sexuales consentidos entre personas del mismo sexo, y establece posibles penas de cárcel para toda persona que “impulse o induzca o incite a un varón, por cualquier medio, a cometer un acto de sodomía o licencioso”. De igual modo, el 296.4 establece sanciones para toda persona que “induzca o incite a un hombre o una mujer, por cualquier medio, a cometer actos contrarios a la moral o que sean ilegítimos”.
En octubre de 2022, organizaciones de derechos humanos documentaron casos en los que las fuerzas de seguridad habían detenido a personas LGBT en lugares públicos —basándose únicamente en su expresión de género— y registrado sus teléfonos. También dijeron que las mujeres transgénero detenidas tenían la obligación de asistir a sesiones de terapia de conversión como requisito para ser puestas en libertad.
¿Libertad de expresión?
Según Amnistía Internacional, las autoridades qataríes usan leyes abusivas para reprimir a quienes mantienen posturas críticas hacia el Estado, ya sean ciudadanos y ciudadanas qataríes o trabajadores y trabajadoras migrantes. Amnistía Internacional ha documentado casos de personas de nacionalidad qatarí que han sido detenidas arbitrariamente tras criticar al gobierno, y condenadas después de juicios injustos sobre la base de confesiones obtenidas mediante coacción.
Libertad de asociación y reunión
En Qatar, los trabajadores migrantes no pueden formar sindicatos ni afiliarse a ellos.
Tanto las personas de nacionalidad qatarí como los trabajadores y trabajadoras migrantes sufren consecuencias por ejercer su derecho de reunión pacífica. Por ejemplo, en agosto de 2022, cientos de trabajadores migrantes fueron detenidos y deportados por las autoridades estatales tras protestar en las calles de Doha por los reiterados impagos de salarios de su empresa.
Juicios nada justos
Amnistía Internacional explica: “Los juicios justos distan mucho de estar garantizados en Qatar. En los últimos 10 años, Amnistía Internacional ha documentado casos de juicios sin garantías en los que nunca se investigaron las denuncias de tortura y malos tratos de las personas encausadas, y se impusieron condenas sobre la base de ‘confesiones’ obtenidas mediante coacción”.
En muchos casos, las personas acusadas habían sido interrogadas mientras estaban recluidas en régimen de incomunicación, sin acceso a abogados o intérpretes.