El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este martes que los 320.000 profesionales que trabajan en servicios a domicilio para personas dependientes recibirán una prima por los esfuerzos durante la crisis sanitaria del coronavirus que se financiará con una partida de 160 millones de euros.
Esos trabajadores, que son en un 97 % mujeres, cobrarán esta prima excepcional entre septiembre y diciembre, en cualquier caso antes de Navidad, señaló Macron en Tolón (sureste), adonde se desplazó interrumpiendo las vacaciones que pasa en la residencia oficial del fuerte de Brégançon.
La prima podrá llegar a los 1.000 euros en algunos casos, precisó la secretaria de Estado encargada de la Autonomía, Brigitte Bourguignon.
Se trata de equiparar a este grupo profesional con el personal sanitario, que también fue recompensado por sus sacrificios para hacer frente a la pandemia.
El jefe del Estado quiso rendirles homenaje y dijo que son ellos los que permiten vivir en sus casas a 800.000 personas de edad avanzada y a 300.000 minusválidos que tampoco pueden valerse por sí mismos.
Además, prometió que se acelerará la puesta en marcha para finales de año de una nueva ley sobre la dependencia, con la que entre otras cosas se pretende mejorar sus condiciones laborales para hacer la profesión más atractiva, ya que en la actualidad no se cubren todos los puestos disponibles.
Por otro lado, Macron confirmó que a partir de octubre se pondrá en marcha un nuevo permiso para aquellos que cuidan de sus familiares dependientes.
