A la hora de contribuir con causas sociales, las empresas cuentan con dos opciones principales. La primera es patrocinar a terceros sin ánimo de lucro que ya se dediquen a este tipo de actividades, como las ONG. La segunda es crear y estructurar sus propias fundaciones para construir programas con fines específicos que respondan a las necesidades de su medio.
En Colombia hay más de 150 mil fundaciones según la Dian, las cuales se han convertido en “actores fundamentales para el desarrollo y la equidad del país”, afirma un vocero de la Asociación de Fundaciones Familiares y Empresariales (AFE), que reúne más de 60 organizaciones.
Las fundaciones asociadas invirtieron “más de $ 450 mill millones de sus recursos propios para aportar a diversas causas sociales durante 2021, como educación, salud, generación de ingresos, desarrollo rural y gestión ambiental”, detalla la AFE.
Además, la asociación indica que el 73 % de las fundaciones ejecutan proyectos, 45 % se dedican a la generación de ingresos, 20 % al hábitat y 30 % a la cultura y el deporte, que son entendidos como elementos necesarios para una responsabilidad social integral.
En cuanto a la población objetivo, “más del 70% de las fundaciones asociadas a la AFE enfocan su atención en atender la población joven en Colombia (de edades de 15 a 29 años) en situación de extrema pobreza, víctimas del conflicto armado y migrantes”, explica la AFE.
En nuestra región
De acuerdo con la AFE, en la región Caribe hay 23 fundaciones empresariales y familiares asociadas que ejecutan programas sociales en los 8 departamentos. Atlántico y Bolívar tienen 14 fundaciones; Magdalena, 13 y Córdoba, 11. “En los departamentos de Atlántico y Bolívar, el sector fundacional ha ejecutado programas que ascienden los 50 millones de dólares en un periodo entre 2013 al 2018, según estimaciones de la OCDE”, apunta la organización.
“El Caribe colombiano es un mosaico diverso. La estructura productiva y el mercado laboral de cada departamento en la región requieren estudios y análisis específicos que contribuyan al diseño de programas sociales que respondan a esas particularidades. Reconocemos al sector fundacional como un actor clave que aporta todo su experticia y conocimiento a la recuperación económica y al desarrollo regional”, explica la asociación.
Una visión integral
Las fundaciones asociadas a la AFE han contribuido para fortalecer la responsabilidad social empresarial a través de sus esquemas. Su enfoque integra el desarrollo de las comunidades y el medio ambiente para construir una sociedad más dinámica y con mayor movilidad sociales desde todos los enfoques.
“Hablamos de acciones responsables ‘integrales’, es decir que trabajen por el mejoramiento integral de la calidad de vida de los beneficiarios de los proyectos sociales de nuestras fundaciones”, afirma la organización. Su objetivo es seguir construyendo un ecosistema robusto de fundaciones y así contribuir a transformar la realidad de las comunidades del país, todo a través del trabajo colaborativo entre diferentes entidades, el aprendizaje y el relacionamiento con actores nacionales e internacionales.
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