El sector comercio, que durante el año ha venido jalonando la economía colombiana, ya empezó a registrar en septiembre signos de desaceleración en sus ventas, reveló ayer en Cartagena el presidente ejecutivo de Fenalco, Jaime Alberto Cabal. (Lea aquí: Lo que preocupa a Fenalco y Asofondos de la reforma tributaria).
Al intervenir en Góndola 2022, el máximo evento del supermercadismo del país, el dirigente recordó que en 2021 la economía colombiana creció 10,6%; mientras el comercio lo hizo al 19,2%. Ya en julio de este año la economía crecía al 12,6% y el sector lo hizo al 17,3%.
Jaime Alberto Cabal, presidente ejecutivo de Fenalco.
Sin embargo, “toda esa tendencia positiva empieza a tener, en contraste, en el mes de septiembre, unos indicadores que nos preocupan. Estos indicadores registran que por primera vez, en lo corrido del año, las ventas del sector muestran una importante desaceleración. Aún así el sector sigue con signos positivos y en este momento, hay que decirlo con toda claridad, tenemos un problema que crece todos los días y es una pérdida de confianza de los empresarios sobre el desempeño de los negocios. Hay un componente externo que no podemos ignorar, como es lo que está pasando en el mundo: la invasión de Rusia a Ucrania, la crisis de contenedores que afectó a la cadena logística, la inflación mundial, el alza de las tasas de interés por parte de la FED de Estados Unidos; pero también, sin duda, hay factores internos, económicos y políticos, poderosos que enrarecen el clima empresarial y generan desconfianza en los mercados internacionales”.
Cabal señaló que los subsectores que muestran esa desaceleración en sus ventas son: alimentos, productos de aseo, confecciones y calzado, equipos de computo y equipos electrónicos.
“Por ello, Fenalco tiene una gran inquietud, y es que si en el país cae el ahorro, cae el consumo y cae las inversiones, la afectación del comercio y el retail es directa y algo muy importante, se lesiona el crecimiento económico y por supuesto la formación de empleo”, dijo Cabal. (Lea aquí: “Si al comercio le va mal, la economía se cae”).
Aprovechando la instalación de Góndola, el máximo evento del supermercadismo en Colombia, Cabal reiteró que la posición de Fenalco frente a la reforma tributaria que cursa en el Congreso, “que ha sido una posición clara, de crítica constructiva, porque no solo levantamos la mano para quejarnos, sino para proponer sobre los aspectos que consideramos pueden afectar el consumo, el ahorro y la inversión”. Dijo, además, que se trabaja para que la reforma tributaria no sea por $22 billones, como se está planteando en el proyecto. Igualmente para que se tenga en cuenta la no afectación a las personas naturales y pensionadas del país, porque lesionan la capacidad de ahorro y el consumo, y para que los impuestos sobre las empresas o personas jurídicas del país no tengan dobles imposiciones, como son los impuesto combinados de renta, de patrimonio, ganancias ocasionales y sobre los dividendos. “Esperamos que en estas dos semanas el Congreso y el Gobierno recapaciten sobre la imperiosa necesidad de morigerar el tamaño de la reforma y los cruces de impuestos que se llevan a cabo”, dijo Cabal.
