Real Cartagena tenía la obligación de ganar en casa, otro resultado sería un puñal para su propio corazón.
El equipo auriverde se veía las caras ante Orsomarso este miércoles, en el Jaime Morón, en el mismo escenario, en el que acumulaba dos derrotas seguidas esta temporada ante Leones y Cúcuta, respectivamente.
Y es que de no lograr la victoria, la hinchada aumentaría su decepción, se comenzaría a morir de la pena, pues la falta de resultados, sumado a las 10 temporadas seguidas en la B ocasionarían un profundo dolor en su corazón.
Orsomarso habría venido a Cartagena con la intención de llevarse un buen botín y al minuto 6 de la primera parte marcó el gol a través de Juan Carlos Cantillo.
Ese tanto le amargaría la vida al Real y a los pocos asistentes al máximo escenario de fútbol de Cartagena. Los minutos pasaban y el auriverde nada que podía empatar, el desespero se apoderaba de los dirigidos por Óscar Passo y en el estadio ya se comenzaba a temer lo peor.
Y así fue: Real tampoco pudo sumar esta vez en casa, en donde ha perdido 9 de 9 puntos posibles, algo que seguramente ocasionará una ruptura total entre el equipo y la hinchada.
En el ambiente quedó claro que tras 10 años de seguido en la B, las cosas en el Real van de mal en peor para tristeza de los cartageneros.
Real formó con: Cristian Arroyave; Edwin López, Daniel Pedrozo, Jhonyy Meza, Marvin Vallecilla; Carlos Franco, Jesús Espinosa, Felix Charrupi, Leyder Robledo; Sebastián Girado y Wilson España.
Este domingo, Real visitará a Fortaleza, a las 3:30 de la tarde. La misión es la misma: ganar para avanzar en la tabla. En otro resultado, Barranquilla y Boca Juniors de Cali igualaron 1-1.
