Luis De Ávila es un muchacho creyente, que se aferra a Dios para hacer realidad sus sueños: ser un lanzador Grandes Ligas.
Cuando los Rockies de Colorado lo descartaron, nunca perdió la fe. Él como toda su familia, se encomendaron al Todopoderoso. Con 17 años entrenaba más duro, con más perseverancia, ilusionado de que muy pronto, Dios lo iba a iluminar nuevamente.
Nunca faltaron los consejos de sus entrenadores Rafael Miranda, Roger Figueroa y de su papá Félix De Ávila, bastión en su carrera y quien le inculcó la frase: “el que persevera triunfa”.
Y de verdad, la fe nueve montaña. Una nueva organización, con más charreteras, le abrió las puertas para que comenzara a soñar nuevamente.
Hoy, más curtido, fornido y con una recta que sobrepasa las 95 millas, Luis De Ávila Pájaro recibió el llamado del scout Rafael Miranda y estampó su firma en los Reales de Kansas City.
Ha sido la mejor noticia para el prospecto arenalero, ya que Dios, que lo ilumina permanentemente, sabe que nunca hizo nada indebido.
Luis siente una paz única en su corazón, ya que cuando vio la noticia del tenista Robert Farah se le humedecieron los ojos. “Dios me dio otra oportunidad para cumplir mis sueños, Estoy agradecido
¿Cómo se logra su vinculación a los Reales?
-La organización me invitó a pasar la temporada instruccional en República Dominicana donde hice lo que mejor sé hacer, lanzar strike. Me fui esforzando cada vez más y afianzando mis técnicas en el montículo. Kansas City decidió firmarme. Ha sido la mejor noticia para toda mi familia, luego que los Rockies decidieron poner fin al contrato.
¿Qué le dijo el scout?
-Que tenía talento, que tuviera en cuenta las buenas herramientas que tengo y la mecánica para seguir haciendo un buen trabajo.
¿Qué herramientas cree que le gustaron a la organización para firmarlo?
-Sin duda, creo que fue la confianza que tengo al enfrentarme a todos y cada uno de los bateadores. Lo positivo que me demuestro en cada juego y la naturalidad en cada uno de mis lanzamientos.
¿Este año va directo a Estados Unidos o se queda en Dominicana?
-Primeramente viajo a Dominicana mañana (hoy) para entrenar en la Academia y posteriormente esperar el llamado a los Estados Unidos. Con la gracia de Dios así será.
¿Cómo cataloga su debut con Caimanes en el béisbol profesional?
-Tuve una buena participación con Caimanes, aunque no tuve muchos lanzamientos, los que realicé fueron contundentes y decisivos dentro de cada uno de los partidos.
¿Cuál es su mejor lanzamiento?
-Sin duda, la recta pegada, primero por su velocidad y segundo porque es uno de los lanzamientos más dominantes, pero también no dejo de lado la curva. Estoy llegando a 95 millas y eso me tiene contento.
¿Cómo se define?
-Como jugador soy muy aplicado y dedicado en lo que quiero, considero que en el terreno de juego hay que estar enfocado en lo que uno quiere, analizar a los bateadores desde antes de mi turno para saber a quien me enfrentaré. Como persona soy muy calmado, humilde, sencillo, eso me enseñaron mis padres. Estoy dispuesto alcanzar mi sueño, trabajando incansablemente día a día para llegar a Grandes Ligas.
¿Cuál ha sido el momento más feliz de su vida?
-El momento más feliz de mi vida se divide en dos, mi firma con los Rockies por ser el primer equipo en confiar en mi talento y donde me estuve preparando por un tiempo para llegar donde todos los peloteros queremos estar, en Grandes Ligas. Y mi segundo momentos es mi nueva firma con los Reales de Kansas City, ya que la organización ha creído en mí, me está brindando una nueva oportunidad para seguir trabajando y dando todo de mí para poder cumplir la meta.
Usted fue uno de los artífices del título de Arenal en el béisbol departamental, ¿cómo cataloga su actuación?
-Sin alabarme, creería que fue una de mis mejores actuaciones, ya que entregué todo para que el equipo Tigres de Arenal conquistara por segunda vez consecutiva el título del béisbol departamental. Hice lo que mejor sé hacer y dominé a cada uno de los bateadores que pasaban por el plato. Sin duda, fue uno de los mejores momentos que he vivido. Ganar un campeonato para mi pueblo y ver tanta gente feliz, eso es fantástico.
¿Su ídolo?
-Yo diría, ¿quiénes son mis ídolos? Tengo tres lanzadores que admiro y sueño con emularlos: el cubano Aroldis Chapman (Yanquis), el arjonero José Quintana (Cachorros) y el mexicano Julio Urias (Dodgers). Los tres son zurdos, como yo, con el favor de Dios estaré al lado de ellos en Grandes Ligas.
¿Su sueño?
-Mi sueño, al igual que el de muchos de los beisbolistas que jugamos en las ligas menores de la MLB, es llegar al Gran Juego, ser Grandes Ligas con todas las letras y llegar a coronar la Serie Mundial.
