Dusty Baker seguirá como mánager de los Astros de Houston para una tercera temporada, tras llegar a un acuerdo por un año con los campeones vigentes de la Liga Americana.
Baker reemplazó a AJ Hinch, quien fue suspendido por las Grandes Ligas tras su participación en el escándalo de robo de señales por parte del equipo, que luego lo destituyó.
Los Astros cayeron ante Tampa Bay en la Serie de Campeonato de la Liga Americana en 2020. Este año, llegaron a la Serie Mundial, donde Atlanta los venció en seis duelos.
“Tenemos un futuro brillante acá, y un presente también”, resaltó Baker el viernes. “Yo simplemente tenía algunos asuntos pendientes que atender, pero estuvimos cerca. Mejoramos cada año”.
Baker, de 72 años, jamás ha ganado una Serie Mundial como mánager. Acumula 1.987 triunfos en campaña regular como piloto.
Dijo que ha disfrutado su gestión en Houston, pese a que debió adaptarse a las nuevas tendencias de análisis avanzado.
“Estuve hablando con algunos de nuestros chicos de la sabermetría y les dije: ‘Oigan, supongo que pueden enseñarle a un viejo perro nuevos trucos’; y ellos me dijeron: ‘depende del perro’”, relató Baker con una sonrisa. “Me imagino que eso fue un cumplido”.
El dueño Jim Crane pronosticó que la nómina del equipo estará cerca del nivel que se sanciona con un “impuesto al lujo”, y posiblemente lo rebase. Hay negociaciones entre las Grandes Ligas y el sindicato de peloteros para definir las reglas que estarán vigentes a partir del 1 de diciembre.
“Si tenemos que hacer alguna transacción para competir y asegurar algo, eso es algo que siempre hemos hecho”, dijo Crane.
Cientos de miles de fanáticos ovacionaron a los Bravos de Atlanta durante un desfile de dos etapas para celebrar la conquista de la Serie Mundial, algo que el equipo no lograba desde 1995.
Algunas escuelas de la ciudad cerraron y los estudiantes aprovecharon la oportunidad para asistir al festejo. “Esta es la parte más divertida de todo”, dijo el presidente de los Bravos, Terry McGuirk. “En cada cuadra había niños, por todos lados. Nunca esperé ver a tantos pequeños fanáticos”. El desfile comenzó en el centro de Atlanta, cerca de la antigua casa de los Bravos, el Turner Field. Luego, los autobuses, carrozas y furgonetas pasaron por un monumento en memoria a Hank Aaron, miembro del Salón de la Fama.