Recientemente, el trabajo cinematográfico se ha enfocado en dar lugar y protagonismo a las historias que no distan mucho de las situaciones de la vida real. Dotadas de fantasía o no, estas obras rebosan de altos niveles de drama, realismo y situaciones que llevan a los protagonistas a vivir en una condición totalmente humana, caracterizada por la debilidad, los errores, el arrepentimiento, la búsqueda de redención y demás temas de carácter social.
Pero, ¿qué pasa cuando el uso de estos temas reales prima sobre un genuino trabajo cinematográfico? ¿Cuándo se premia a una obra por la calidad de su arte y no por lo controversial de su temática? ¿Es correcto dar valor a una obra por mostrar estas historias o es solo otra forma de discriminación? Lea también: Las películas que arrasaron en los Óscar y dónde verlas
Lo anterior es la premisa que representa el pensamiento del público, críticos y amantes del cine en general, quienes han considerado que en los Premios Óscar de este año se otorgaron reconocimientos, en su mayoría, a películas que fomentaron temáticas inclusivas, dejando en la sombra a otros proyectos de gran peso argumental, nivel artístico y trabajo de producción que pudieron pasar a la historia como obras del arte cinematográfico.
El cine del hoy
El pasado 12 de marzo tuvo lugar la celebración de la 95.ª edición de los Premios Óscar. Durante la ceremonia, fueron reconocidas diferentes producciones estrenadas en cines y plataformas de streaming durante el año 2022.
De entre las sorpresas de la noche, la película ‘Todo En Todas Partes Al Mismo Tiempo’ fue la que logró una gran victoria al ganar en varias de las categorías en las que estaba nominada, incluyendo el mayor honor de la ceremonia, el Óscar a Mejor Película.
La película, a pesar de ser estadounidense, contó con un elenco, trama y contexto ambientado en la cultura asiática, siendo un caso similar al triunfo aplastante que logró la película coreana ‘Parásitos’ en los Premios Óscar de 2020. Este hecho ha fortalecido la creencia de que se ha venido presentado un enaltecimiento constante a la diversidad étnica en los Premios de la Academia.
En años pasados, como 2015 y 2016, se decía que las premiaciones estaban colmadas de actores blancos y reconocidos. Tras esto, el movimiento inclusivo dio sus primeros pasos en la industria, llegando a convertirse en un requisito que se ha implementado levemente hasta hoy, pero que se aplicará en el futuro del cine de manera estricta. Lea también: Ana Veydó se atrevió a presentar la música llanera ante el mundo
Para 2024, la Academia exigirá a las nominadas cumplir con ciertos requisitos de diversidad e inclusión para ser consideradas. Entre los requisitos figuran algunos como: Que al menos uno de los protagonistas represente a minorías, o que lo haga el 30 % del reparto secundario, así como que el equipo técnico detrás de las cámaras cumpla también con ese porcentaje.
Este cambio llegó debido a las protestas raciales en Estados Unidos y tras varios años de críticas hacia la Academia de Hollywood por la falta de diversidad entre sus nominados, que, por otra parte, reflejaba la dinámica de trabajo en la industria audiovisual estadounidense.
Al contemplar este panorama, ¿es realmente posible que el afán por diversificar pueda terminar desplazando a verdaderas joyas del cine?
Citando la opinión del crítico de cine Carlos Boyero sobre el triunfo de ‘Todo En Todas Partes Al Mismo Tiempo’, “repaso las películas que competían con ella para llevarse la tarta y descubro que son escasas las que me atraen mínimamente. Es veraz y bonito lo que cuenta Spielberg en ‘Los Fabelman’. Existe retorcimiento atractivo y otras cosas que me sobran en ‘Tár’. La pavorosa guerra está bien descrita en ‘Sin novedad en el frente’. Es cine digno. El resto es fórmula, nadería pretenciosa, oportunismo, tedio, corrección política”.
Discriminación positiva

Como el caso de ‘Todo En Todas Parte Al Mismo Tiempo’, la película ‘The Whale’ fue otra de las cintas que, a pesar de no haber ganado tantos premios, tuvo una presencia marcada en el ámbito de la diversidad.
La película que le confirió el Óscar como Mejor Actor a Brendan Fraser, siendo este el pináculo de su renacer en la actuación, está colmada de características propias de la inclusión, vistas desde los temas de la sexualidad y el cuerpo mismo. Lea también: Tres datos sobre The Whale, la película que revivió a Brendan Fraser
Si bien Fraser se hizo merecedor del premio debido a la encarnación de la depresión, la pena y la falta de confianza misma que demostró en pantalla, no se puede obviar el contexto en el que se ambienta la película y cómo los detalles de la obesidad, las preferencias sexuales y la depresión toman protagonismo, convirtiendo a la cinta en un reflejo de la realidad sufrida por millones, siendo a su vez un llamado a la aceptación personal y social de estas condiciones, vendido a través de una historia conmovedora.
Aún hay espacio para el arte

Así como la inclusión en la gran pantalla primó durante la ceremonia de este año, otras películas fueron reconocidas por su desempeño en el trabajo de producción y calidad cinematográfica.
‘Sin novedad en el frente’ resultó ser una joya del cine extranjero con temática histórica. Proveniente de Alemania, la película logró ganar varios premios durante la velada, como Mejor Película Extranjera, Mejor Banda Sonora, Mejor Fotografía y Mejor Diseño de Producción. Demostrando que, para lograr el éxito en el cine, más allá de los temas controversiales, se necesita de un buen empeño en la producción y una gran historia que atrape la atención de los espectadores.