Alberto Linero es un gran admirador de Adolfo Pacheco, del maestro y de ese don suyo de componer canciones tan profundas.
En esta mañana de sábado, apenas se enteró de la noticia de la muerte de Adolfo, Alberto dedicó, más que un mensaje triste, unas palabras repletas de gratitud en su nombre. Lea aquí: Falleció el maestro Adolfo Pacheco tras grave accidente de tránsito
Gracias maestro Adolfo Pacheco A. Por sus canciones, sus enseñanzas y todos los momentos compartidos.
— Alberto Linero (@PLinero) January 28, 2023
Pero esta no es la primera vez -y seguramente tampoco será la última- que Alberto Linero se refiere al juglar de San Jacinto.
La más recordada, quizá, tiene que ver con uno de los momentos más trascendentales en la vida de Linero: cuando anunció que dejaría de ser sacerdote.
“La vieja me trajo al mundo dicharachero y contento.
— Alberto Linero (@PLinero) January 28, 2023
No quiero solemnidades, tampoco me carguen luto.
Que suenen las acordeones y gaitas para el difunto”. Del hombre del Espejo de Adolfo Pacheco. @brandondejesusb me recordó esta frase y la celebro. #AdolfoPacheco
Alberto Linero fue uno de los sacerdotes de la iglesia Católica más reconocidos en el país: no solo compartía de la palabra de Dios desde el templo, sino que se tomó espacios de la radio y de la televisión colombiana, y, por supuesto, las redes sociales, para cumplir con su misión de evangelizar, pero lo hacía con un estilo cercano, carismático y muy costeño. Su labor como escritor también le mereció gran reconocimiento en todo el país.
“Me mamé de cosas mías, de soledades, de cosas que no entiendo. Me cansé”, dijo en Blu Radio, la emisora donde trabajaba en ese entonces. “La gran tragedia mía ha sido la soledad del último tiempo”. Tenía 49 años en ese momento. Lea aquí: El padre Alberto Linero ya no quiere ser sacerdote, pidió su retiro a la Iglesia
En medio de esa conversación, los periodistas pusieron a sonar un clásico de clásicos del maestro Adolfo Pacheco: ‘Me rindo, majestad’.
“Mira cómo dice...”, comentó Linero y comenzó a cantar con mucho sentimiento: “Voy a vivir la vida de otra manera, voy a seguir quemándola de otro modo...”.
Tan emotivo fue el momento que el sacerdote lloró y no pudo continuar cantando.
‘Me rindo, majestad’ fue compuesta por el maestro Pacheco en 1983 y grabada por Beto Zabaleta.
Linero, precisamente, comenzó a vivir de otra manera y reveló después que había conseguido pareja.
Escuche la canción:
