Conozco desde hace muchos años al artista Rafael Dussan, cuya pintura es el entramado visual de lo invisible que resuena en el imaginario de las historias de Cartagena. Él hace visible eso que el texto de la historia muchas veces no hace visible, sutilezas de la vida y del espíritu de los seres humanos en ámbitos tangibles, como habitar el corazón de una ciudad amurallada. Lea aquí: Nueva sala de exposiciones acoge la muestra Entre Línea.
Hace años logró descifrar los cuerpos atormentados bajo la inquisición cartagenera. Cuerpos vulnerados por el miedo, el pudor y el castigo. Cuerpos violentados por la inquisición. Dussan ha recorrido discreta, pero de manera certera, el mapa de esa historia, como quien desciende al galeón sumergido y descubre el espíritu de un capitán libidinoso, despiadado y codicioso. O descubre bajo las aguas las máscaras sumergidas de la historia cartagenera. Dussan estuvo a punto de ser monje, pero la vida lo llevó a otras altísimas y desconocidas liturgias de la existencia cotidiana.
Un secreto histórico
Ahora Rafael Dussan y Raúl Ballesteros han intervenido los muros de la Sala Alterna de Exposiciones del Centro de Formación de la Cooperación Española en Cartagena, un ámbito de la historia cultural de la ciudad donde duermen voces del pasado de hace más de tres siglos. En uno de esos secretos ámbitos de ese monumento histórico se cree está enterrado Blas de Lezo. Los cazadores de milagros históricos no han podido precisar en qué punto del viejo claustro de Santo Domingo, reposa el hombre que defendió a la ciudad del ataque de Vernon y humilló a los soldados ingleses que cantaban victoria antes de llegar al puerto cartagenero.
Rafael Dussan-Raúl Ballesteros, Artistas.
En Cartagena basta abrirle una herida a la tierra para que sangre la historia. Recientemente se han encontrado en las restauraciones que se desarrollan en la ciudad, camposantos secretos presumiblemente de los primeros pobladores de esta ciudad al pie del mar. Los huesos de la historia de más de tres centurias están confundidos con los restos de frailes, niños y mercaderes. Pero en la sala que acaban de intervenir los dos artistas, hay una memoria que palpita debajo de las pinturas.
A cuatro manos
Rafael y Raúl trabajaron en varias sesiones con técnica mixta: carboncillo, tiza, lápiz, rotulador, pintura acrílica y pigmentos minerales, esta obra que ellos han denominado ‘Entre líneas’.
Al final de esta aventura artística, la obra emergió de los muros como “una obra monocromática, en la que conversan dos estilos y dos trazos distintos”. Los artistas forjaron una obra luego de observar la relación de los habitantes del sector La Unión, en Torices con sus cuerpos de agua. Más allá de ser una reflexión sobre una problemática ambiental, es también un retrato humano de ciudad.
Lo más complicado para un artista es racionalizar el universo de sus emociones y de sus convicciones, pero los dos han sustentado la obra precisando que “el frágil equilibrio de la vida está en juego, en una constante lucha entre la presencia humana y las silenciosas fuerzas de la naturaleza cada vez más vulnerables y en riesgo. En ese juego se acrecientan las brechas sociales y se perfilan los excluidos y marginados, en tanto emergen algunos depredadores urbanísticos”.
Esta exposición es la primera que se exhibe en esta nueva sala de la Cooperación Española y puede ser visitada gratuitamente de lunes a domingo, en horario de 8 de la mañana a 7 de la noche.
‘Entre líneas’
‘Entre líneas’ es la conjunción de una historia dibujada por los artistas Rafael Dussan y Raúl Ballesteros. Rafael Dussan Mejía ha indagado afortunadamente dos ámbitos en su arte: la historia y la naturaleza. Su obra enriquece colecciones privadas en Colombia, Estados Unidos, Guatemala, Panamá, Alemania, Francia, Italia, Bélgica, Austria y España. Su arte integra la colección del Museo de Arte Moderno de Cartagena de Indias y del Museo Histórico de Cartagena (MUHCA). Ha sido docente de dibujo e historia del arte. Actualmente vive en Cartagena. Realizó estudios de filosofía, teología y psicología en el Seminario Mayor de Bogotá y en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá. Posteriormente, su formación en artes visuales la realizó en Bogotá, París y Milán centrándose en el estudio del dibujo cuyo lenguaje es el hilo conductor de su obra.
Raúl Ballesteros: es un creador cartagenero egresado de la Escuela de Bellas Artes de Bolívar e historiador de la Universidad de Cartagena. Tiene una especialización en fotografía e imagen de Lasalle College Internacional, Bogotá.
Sus pinturas exploran la memoria regional e investigan el universo humano de las comunidades. Ballesteros ha realizado ilustraciones de gran formato en acrílico sobre lienzo y ha reciclado diversos materiales en obras de arte en formato tridimensional.