Residentes en La Boquilla reportaron este jueves la presencia de caracoles africanos en varios lotes enmontados de este corregimiento. situación ya provoca temor entre la comunidad porque estos moluscos están incluidos dentro de las cien especies exóticas invasoras más dañinas en el planeta.
Para Benjamín Luna, líder del corregimiento, la presencia de estos animales se disparó con la reciente temporada de lluvias.
“Desde hace mucho tiempo hay presencia de caracoles africanos en La Boquilla, pero con la ola invernal aumentaron y ya son varios los lotes enmontados donde aparecen estos animales. La comunidad ya está al tanto de la situación. Sin embargo, las condiciones ambientales son gravísimas aquí en La Boquilla y merece la atención de las autoridades sanitarias”, señaló Luna.
El Universal conoció que moradores en San Fernando también han identificado la presencia del molusco en predios ubicados en la entrada de este barrio.
¿Qué se debe hacer?
En abril de este año el Establecimiento Público Ambiental, EPA Cartagena, emitió una alerta a la ciudadanía frente a la proliferación de los caracoles africanos con el inicio de la temporada de lluvias. La autoridad ambiental adelantó visitas técnicas y pedagógicas en diversos barrios para que los ciudadanos conozcan como actuar frente a la presencia de estas especies. Lea: Caracol africano, otra temible amenaza para Cartagena
El EPA dejó claro que el caracol africano es una especie altamente peligrosa que puede ocasionar graves afectaciones a la salud humana y por eso entrega las siguientes recomendaciones.
- No tocar los caracoles y evitar el contacto con la baba, especialmente con ojos, nariz, boca y heridas.
- Lavar inmediatamente sus manos, si tocó al caracol o cualquier superficie que pueda haber estado en contacto con baba o heces del caracol.
- No utilizar el caracol como mascota o carnada.
- No utilizar venenos contra el caracol, ya que pueden afectar a niños y adultos, mascotas, fauna nativa, cultivos y contaminar el suelo, las aguas y los alimentos, con el mismo.
- Eliminar del jardín basura, escombros, restos de madera o cualquier elemento que pueda ser usado como refugio por el caracol.
- Capturar los caracoles, cuando sea necesaria su manipulación, sin tocarlos directamente con las manos, usar guantes.
- Acumularlos en recipientes o bolsas bien cerradas con Cal o Sal, para su posterior disposición final.
