El escepticismo aún reina tras la promesa del Distrito de la apertura definitiva del mercado de Santa Rita. Aunque el alcalde (e) de Cartagena, Pedrito Pereira, le aseguró en junio pasado a El Universal que esto se daría en julio mientras acomodaban a los 238 vendedores de Bazurto y Santa Rita que ocuparían el lugar, solo hasta ahora el mandatario da una fecha en la que la ciudad podrá por fin hacer sus compras en esta plaza.
“La fecha tentativa que tenemos para la apertura total del Santa Rita es a finales de agosto. Pensamos habilitarlo para los cartageneros poco a poco, mientras los vendedores se ubican en sus negocios. En estos momentos estas personas están cobrando los incentivos que el Distrito les dará como un capital semilla, y mientras esto pasa estamos revisando temas estructurales como el de las inundaciones, resaltando que este edificio lo encontramos construido, pero pensando siempre en el bienestar de toda la ciudad”, dijo el mandatario.
Por otro lado, explicó que en estos momentos la administración distrital le suministra apoyo a los comerciantes para que terminen con los trámites de tesorería y puedan percibir las compensaciones económicas que les permitan surtir los locales comerciales que les fueron entregados.
“Se continúan realizando acciones de mejoras logísticas, como lo son la asignación del área especial para el servicio de recolección de residuos sólidos del nuevo Mercado de Santa Rita, adecuación de los locales sector víveres y frutas; y optimización de las redes eléctricas internas”, dijo.
Pereira precisó que el 3 de julio pasado, fecha establecida en la Resolución 4378 del 31 de mayo de 2019 como límite para dar apertura al edificio nuevo, este se abrió contando con la participación de 101 comerciantes, entre aquellos que ocupaban el antiguo mercado y los que serán trasladados desde Bazurto. Dijo que a partir de esto con los comerciantes del mercado se ha avanzado en las siguientes actividades: asignación y entrega física de los locales a cada comerciante que haya suscrito el correspondiente contrato de uso; recepción de las reclamaciones de los comerciantes que solicitan mayor espacio; adopción de un instructivo para el pago de las compensaciones económicas; y realización de capacitaciones en materia de reglamento del nuevo mercado en materia de residuos sólidos y practicas sanitarias, así como en procedimientos logísticos con los que operaría el nuevo mercado.
Para que se diera la apertura, fue necesaria una mesa de trabajo entre el Distrito y los comerciantes de Santa Rita, teniendo en cuenta que uno de los percances fue la negativa de administraciones pasadas para el otorgamiento de un respaldo económico, lo que hizo que los vendedores no cedieran.
“Además de las adecuaciones en el edificio del nuevo mercado de Santa Rita, tales como instalación de medidores de gas, jornada de aseo para entrega de los locales, numeración de los locales y autorización al operador de energía eléctrica, se concilió con los comerciantes para el otorgamiento de recursos, ya que si este paso no se da, el mercado continuará a puertas cerradas”, concluyó Pereira.