No es un secreto. La crisis política e institucional que ha padecido Cartagena en los últimos años impone un enorme desafío a los futuros dirigentes. Gremios, líderes de opinión y los mismos ciudadanos están a la expectativa de cómo gobernará el nuevo mandatario de la ciudad, teniendo en cuenta el convulso panorama.
De cara a la próxima contienda electoral, la junta directiva del Centro de Pensamiento de Cartagena y Bolívar (CPCB) aunó esfuerzos y con ayuda de universidades y entidades, como la Cámara de Comercio, Invest In Cartagena, el Centro de Estudios para el Desarrollo y la Competitividad (CEDEC) y la organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, elaboró un documento que integra los principales retos que requieren prioridad y que son necesarios para alcanzar un desarrollo sostenible.
En este sentido, los principales temas que debe tener en cuenta el próximo mandatario y que sirven de base para los planes de gobierno de los aspirantes son:
Entre los principales retos está el Plan de Ordenamiento Territorial (POT). Según el Centro de Pensamiento, este requiere una actualización y su revisión deberá estar fundamentada en la sostenibilidad ambiental y en las acciones para la protección por los efectos del cambio climático.
“Tiene que haber un Plan de Ordenamiento Territorial, que esté fundamentado en la sostenibilidad ambiental y en la Gestión del Riesgo por todas esas condiciones que tenemos como territorio costero, de esa vulnerabilidad que tenemos por nuestra ubicación y, que en efecto esa es la modificación que le falta a nuestro POT”, explica Paola Mercado, directora Ejecutiva.
Dentro de la construcción del POT, para el Centro de Pensamiento es clave trabajarlo en consonancia con el Plan de Ordenamiento Departamental (POD), para evitar que se anulen las necesidades de la región y articularlo además con la Región Administrativa y de Planificación (RAP Caribe).
Para el Centro de Pensamiento, en la RAP Caribe se integran los proyectos e iniciativas de inversión priorizadas para cada región que deben ser aprovechadas por los departamentos asociados.
La localización de Cartagena permite visionarla de acuerdo con sus principales estructuras ecológicas y sus cuerpos de agua.
El Centro de Pensamiento destaca tres aspectos básicos para trabajar en una política que integre el aprovechamiento de los recursos hídricos.
El primero tiene que ver con un Sistema Integral de Monitoreo Inteligente, que permita el desarrollo de un sistema capaz de emitir alertas en tiempo real de una manera precisa y oportuna, que faciliten la toma de decisiones y la implementación de medidas pertinentes para evitar pérdidas materiales, ambientales y de personas.
Otro aspecto tiene que ver con el trabajo para reducir la contaminación del aire. “En la actualidad, no se registra seguimiento de los impactos generados por las emisiones generadas en la ciudad”, explican.
Para el Centro de Pensamiento, es fundamental la puesta en marcha del proyecto de drenajes pluviales, para evitar no solo las constantes inundaciones, sino para dinamizar una nueva movilidad ciudadana y fomentar nuevas prácticas de economía urbana.
El documento plantea algunas líneas importantes que pueden ser tenidas en cuenta por los candidatos a la Alcaldía para la creación de la política pública de seguridad alimentaria y nutricional para Cartagena y Bolívar.
Se destacan: promover la innovación en la planeación y ejecución del gasto público; renovar y reactivar los Comités Departamental y Distrital de SAN y promover un observatorio a nivel territorial, para el monitoreo, evaluación y gestión del conocimiento en la coordinación e integralidad de las estrategias para erradicar el hambre. “La heterogeneidad del departamento merece estrategias diferenciadas. Implementar medidas para erradicar el hambre, acompañadas de diseño de propuestas para atacar las causas estructurales de la inseguridad alimentaria y nutricional. Incentivar la adquisición de alimentos para una dieta sana y fortalecer sectores productivos promisorios, como la pesca, con enfoque étnico, de género y territorial”, dice el documento.
El documento de 63 páginas está disponible para todos los aspirantes a la Alcaldía de Cartagena que estén construyendo sus planes de gobierno, pero también para la ciudadanía interesada.
Según lo consignado en este documento, la política de desarrollo económico de Cartagena y su región puede enfocarse en el objetivo general de impulsar la competitividad agropecuaria desde la inclusión productiva y geográfica, impulsando nuevas prácticas, productos y la interconexión entre mercados para reducir brechas y problemáticas socioeconómicas.
“A través de la Federación Nacional de Departamentos (FND) se debe promover y presentar propuestas de una reforma tributaria territorial que fortalezca los ingresos corrientes, dado que en las últimas décadas se han debilitado no solo por las razones anteriores, sino también por la falta de recursos que provenían de industrias licoreras regionales y loterías departamentales afectándose especialmente el sector de la salud”, se lee en el documento.
El Centro de Pensamiento invita a los futuros gobernantes a convocar a las organizaciones privadas, académicas y publicas para consolidar una política pública de desarrollo económico para la ciudad y la región.
Para el Centro de Pensamiento, que Cartagena sea una ciudad con riesgo alto de corrupción, según el índice de transparencia de municipios elaborado por Transparencia por Colombia, genera una alerta para los nuevos candidatos.
Para ello proponen que se consolide un Pacto por Cartagena. “Es importante integrar los sectores públicos y privados, la sociedad civil y la academia con el propósito de gestionar y promover la generación del conocimiento a partir de temas estratégicos y de aportar a la toma de decisiones efectivas para la construcción de región, por medio de un espacio de reflexión. Es fundamental fortalecer el Centro de Pensamiento ya constituido por la Cámara de Comercio de Cartagena, que contribuya a la formulación y articulación como generadores de conocimiento en pro de temas sociales, económicos y ambientales que redunden en beneficio para la región”.
El factor de la competitividad es clave según el Centro de Pensamiento, ya que este lineamiento se mide por los siguientes ítems: condiciones básicas, eficiencia y sofisticación e innovación. En el documento se explica que uno de los retos para Bolívar es “mejorar acciones que impacten este factor a fin de superar los rezagos en materia institucional, educación básica y media, salud, saneamiento básico e infraestructura, necesarias para generar procesos de mejora sostenible y que ayudan al cierre de brechas, inclusión social en el territorio y productividad”.
Se plantean líneas estratégicas para promover la inversión nacional y extranjera, y el fortalecimiento institucional para la competitividad y crecimiento económico, entre las que se destacan: un discurso unificado de ciudad y departamento, captación y promoción conjunta, entidades alineadas y propuesta de incentivos tributarios.
