La pandemia por el COVID-19 ha llevado a la quiebra a algunas organizaciones, ha dejado cientos de desempleados y todavía muchos no ven la luz al final del túnel. Sin embargo, también ha servido para que algunas empresas se reinventen y otras más nazcan.
Un ejemplo de hallar esas oportunidades en un panorama para muchos oscuro, es la microempresa Traecolombia que crearon dos amigos cartageneros, del común, la cual se dedica a los domicilios de toda clase de productos y que ofrece a los clientes un amplio portafolio de servicios que van desde mensajería hasta hacer largas filas para pagarles los servicios públicos.
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La iniciativa lleva un mes y ha tenido gran acogida en la gente, tanto que ya suma cerca de 30 empleados que andan en motos recorriendo la ciudad llevando encargos, bajo un estricto compromiso, con seriedad y responsabilidad.
Carlos Arteaga es uno de los fundadores. El joven quiso hacer público su emprendimiento para que sea más conocido y sobre todo para servir como ejemplo a otras personas que no se deciden a salir adelante por medios propios.
“Tenía un negocio con un socio pero a raíz de la pandemia se vino abajo. Pero no quisimos dejar a la gente sin ingresos así que nos craneamos la idea de fundar a Traecolombia, que hace domicilios de forma rápida, ágil y segura. Nuestro portafolio nos hace diferentes a los demás porque trabajamos con todo tipo de servicios, sean alimentos, bebidas, floristería, repostería, repuestos, entre otros. Si alguien deja sus llaves en la oficina, nosotros vamos, se las recogemos y se la llevamos a donde esté; si alguien necesita enviar un computador, un secador de cabello, un electrodoméstico, también se lo transportamos. Si alguien necesita hacer la fila de un banco, pagar los servicios públicos, hacer una consignación, nosotros lo hacemos por él. Nos queremos convertir en la primera alternativa de los cartageneros”, explicó Arteaga, agregando que las cerca de 30 personas que trabajan con ellos son padres de familia de alta confianza, que cumplen con todos los protocolos de bioseguridad y la idea es seguir expandiéndose para vincular a más personal.
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De momento, los convenios los tienen con empresas conocidas como restaurantes, y con los seguidores que han ido en aumento en las redes sociales, en donde ya contabilizan cientos.
“Ojalá muchas más personas se motiven a crear empresa, es muy gratificante poder ayudar con empleo a quienes no cuentan con suficientes recursos”, finalizó Arteaga.