Un domiciliario que entregaba un pedido en la puerta de un edificio en el Alto Bosque, fue atracado a principios de agosto por un delincuente armado que lo intimidó y le arrebató un celular junto con las ganancias del día.
Lo más indignante fue que el bandido huyó a bordo de una moto junto a un compinche que lo esperaba en una esquina, siendo este uno de los barrios de Cartagena donde está prohibida la circulación de parrilleros. (Lea: Video: atraco a domiciliario rebosó la copa en el Alto Bosque)
El hurto se volvió viral en toda la ciudad y sirvió para que las autoridades atendieran el clamor de los habitantes y líderes comunales, quienes desde hacía mucho tiempo venían denunciando la elevada inseguridad en la zona.
El pasado viernes 12 de agosto, la Junta de Acción Comunal del Alto Bosque convocó a la administración distrital con sus diversos representantes y a la Policía Nacional para abordar la problemática. Inexplicablemente no hubo presencia de la Secretaría del Interior.
Claudia Núñez, presidenta de la JAC, explicó que tras conversar deliberadamente sobre el tema, se llegaron a varios compromisos.
“La Policía va a realizar más patrullajes en las horas pico o con mayor número de atracos en el sector. No se pudo conseguir un CAI móvil porque la institución no cuenta con estos por vencimiento de la documentación de los vehículos. Con la Secretaría de Participación se coordinó realizar las solicitudes respectivas para vincular el programa Dignificación del Trabajo y el Reciclaje. También gestionamos con ellos la posibilidad de un convenio con una fundación que se encargue de reciclar, para evitar la circulación y la búsqueda en las basuras de este material por parte de los recicladores. De igual manera, se solicitó realizar el perfil de los habitantes de la calle que se encuentran dentro del barrio y en el parque Elisa del castillo”, manifestó la presidenta de la JAC.
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Más gestiones
Aunque de la Secretaría del Interior no hubo representantes, los habitantes harán una solicitud de manera formal para la dotación de siete alarmas con botones de pánico, y soporte técnico a los circuitos cerrados de cámaras ya existentes que por falta de mantenimiento dejaron de funcionar.
“Con Distriseguridad se solicitó el apoyo psicosocial para los colegios Olga González Arraut y el colegio Fernando de la Vega, instituciones cuyos alumnos manejan enfrentamientos entre ellos y sectores aledaños al Alto Bosque con relativa frecuencia. De igual manera, les pedimos servir de puente con la Secretaría del Interior para la consecución de las alarmas y el soporte técnico”, finalizó la lideresa.
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Finalmente y pese a los compromisos, la comunidad no quedó del todo satisfecha, ya que lo se abrió fue la posibilidad de empezar a gestionar un sin número de actividades que por derecho propio debieron ser realizadas o ser ya una realidad.