Desde el 2015, cuando los centros de salud de El Pozón, Canapote, Barú y Bayunca fueron demolidos para ser reconstruidos, los habitantes de estos sectores tenían la esperanza de tener, en poco tiempo, unos espacios de atención médica en óptimas condiciones. Sin embargo, transcurrieron los años y las obras quedaron inconclusas.
Pese a que pasaron diferentes administraciones y todas aseguraban que reactivarían los trabajos en estos centros de salud, nada pasaba. Fue así como en el 2020 el alcalde William Dau, en medio de la pandemia, se propuso reactivar dichas obras. Lo hizo pensando en reforzar la infraestructura hospitalaria y así hacerle frente a la pandemia por COVID-19. Lea aquí: ¿Qué pasará con los centros de salud inconclusos?
Para esto decidieron priorizar cinco centros médicos: UPA de Daniel Lemaitre, hospital de El Pozón, hospital de Canapote, el CAP de Bayunca y el de Barú. Sin embargo, solo la UPA de Daniel Lemaitre fue terminada. La entregaron el 30 de noviembre del año pasado.
Los demás centros de salud siguen inconclusos debido a una serie de líos jurídicos con unos trámites. Se siguen esperando las pólizas de construcción.
Así va el proceso
Durante el 2020 un nuevo contratista adquirió los derechos de ejecución de estas obras, las cuales fueron incluidas en el Plan Compromiso Colombia, en el marco de la Ley 2020, con el apoyo de la Contraloría General de la República. Le recomendamos: Centros de salud: faltan licencias para reiniciar obras inconclusas
Es por esto que el Distrito ha doblegado esfuerzos para solucionar los problemas jurídicos y que esto permita terminar las obras. Mientras tanto, las comunidades de Canapote, El Pozón, Barú y Bayunca siguen esperando.
“Estamos trabajando en el tema. Ya se tienen las pólizas por parte del contratista y estamos a la espera de las pólizas por parte de la interventoría, que están en expedición”, comentó. El secretario explicó que las obras arrancarían apenas este documento sea expedido y aprobado.
“Esa póliza de parte de la interventoría es lo único que nos falta, pues la más difícil, que era la del contratista, ya se radicó y aceptó”, finalizó Villadiego. Este medio trató de contactar a la interventoría de estas obras para conocer los pormenores en la demora de la expedición de este documento, pero no fue posible.