Más de dos meses tiene el emblemático parque de Bruselas a oscuras, debido a que más de 10 lámparas se dañaron de manera repentina. Una a una, las farolas se fueron apagando y esa falta de iluminación ha traído como consecuencia que la sensación de inseguridad aumente en la zona y que los consumidores de droga se hayan apoderado de ella en las noches, afectando la tranquilidad de los residentes.
Este es uno de los espacios recreativos más usados no solo por los habitantes de Bruselas sino por los de sectores aledaños, ya que cuenta con escenarios deportivos y máquinas biosaludables. Sin embargo, la oscuridad reinante en las noches y en las madrugadas ha provocado que tanto jóvenes como adultos mayores se alejen un poco de sus actividades físicas y saludables.
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Carlos Flórez Díaz, presidente de la Corporación Sociocultural de Bruselas, lamentó que tras varias semanas solicitando ayuda a las entidades competentes, no les hayan resuelto el problema. Esta corporación es la “madrina” del parque, pero es sin ánimo de lucro y por eso no cuenta con recursos para resolver el daño por sí misma.
“Nosotros tenemos a cargo el mantenimiento del parque, lo limpiamos, pero comprar lámparas nuevas se sale de nuestras posibilidades, por eso le hemos pedido insistentemente a Afinia que nos apoye y hasta ahora no hemos obtenido respuestas. Este es un escenario muy importante para Cartagena, aquí vienen deportistas, artistas y actores festivos, es un gran epicentro cultural de la ciudad y necesita estar en óptimas condiciones”, aseguró Flórez.
El Polideportivo y la plaza cultural hacen de Bruselas un barrio privilegiado. La zona fue recuperada por la Gobernación de Bolívar y reinaugurada en diciembre de 2017, quedando con todas las especificaciones requeridas, moderna y a disposición de los cartageneros.
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Y aunque la mayoría de elementos se conservan en buen estado, la reciente oscuridad es el primer gran problema que presenta el lugar. “Aquí un sábado o un domingo pueden tener hasta 200 y 300 personas haciendo actividad física, hay movimiento, se ponen varios vendedores y eso le da vida al parque, pero cuando son las 7 de la noche empieza a irse todo el mundo porque no hay suficiente iluminación, y es cuando llegan algunos jóvenes y se esconden a fumar”, añadió el gestor comunal.
De las 22 lámparas que hay en el parque, 15 están dañadas.
Este medio se comunicó ayer a mediodía con el coordinador del alumbrado público de EPM para ponerlo en conocimiento de la situación, y aseguró que programarían una visita a Bruselas lo antes posible para dar pronta solución a la afectación.
Sin embargo, la actuación de EPM fue más rápida de lo esperado, pues ayer en la tarde nos informaron que ya habían arreglado el daño.
Cabe recordar que Afinia no maneja estas situaciones.
EPM puso a disposición de las comunidades las líneas: #676; el número 018000415115 o
el correo epm@epm.com.co
Las solicitudes se atienden máximo en 36 horas.