La semana pasada se dio inicio a las obras preliminares de protección costera que consistían en la instalación de señales viales de seguridad conforme al plan de manejo de tráfico aprobado. El anuncio de intervenir el tramo entre Seguros Bolívar y la curva de Santo Domingo, motivó a servidores turísticos a realizar una protesta el pasado jueves que bloqueó la entrada y salida de Bocagrande durante cinco horas, al considerar que 2.158 trabajadores iban a quedar desprotegidos. (Lea: Tras más de cinco horas de protesta, se levanta bloqueo en Bocagrande)
Sin embargo, el alcalde encargado y secretario del Interior, David Múnera dijo que su retorno a las zonas intervenidas se darán una vez finalicen las obras según tramos correspondientes. Otra de las preocupaciones era el tránsito de vehículos de carga pesada en temporada turística.
El consorcio Proplaya -encargado de la ejecución del proyecto- reiteró que en enero se percibirá el tránsito de este tipo de vehículos. “Vamos a iniciar movilización a la obra el lunes próximo. Se harán las adecuaciones del sitio, campamentos y movimientos menores de piedra para en enero poder recibir los vehículos de carga pesada en las cantidades que requiere el proyecto”, contó Juan Carlos Monzón, representante del consorcio. (También le puede interesar: “Pedimos que aplacen la protección costera para después del 20 de enero”)
Reciba noticias de El Universal desde Google News El pasado viernes el consorcio, representantes de acciones comunales, la Sociedad de Ingenieros y Arquitectos de Bolívar (SIAB) y el DATT, realizaron una reunión para la socialización del Plan de Manejo de Tráfico (PMT).
“La reunión de ayer (viernes) fue para socializar el PMT aprobado. El resultado es que se va a iniciar con el plan conforme está aprobado y si se detectan necesidades de ajuste se realizarán en enero”, agregó Monzón.
El presidente de la SIAB, Eladio Uparela, ofreció a la entidad a ser intermediario entre el DATT y el consorcio: “Después de revisar la información oficial de parte y parte, transmiten la sensación de poder llegar a un acuerdo, pues ambos manifiestan lo mismo: Se busca generar la menor afectación posible por ruido, a la infraestructura pública, los bienes de la ciudadanía, entre otros que tienen lugar en la zona de influencia de las vías urbanas por donde se propone el traslado del material de gran peso y tamaño”.
Por su parte líderes comunales de Bocagrande, Castillogrande y El Laguito (Bocala), celebran el inicio de las obras. Reconocen que las afectaciones por la ejecución de las obras son necesarias. “Es oportunidad que estábamos esperando. Sabemos que las intervenciones van a generar caos pero lo importante es que haya un buen control del tráfico. Estuvimos presente en la reunión con el DATT y el consorcio, donde se presentaron varias alternativas y llegamos a la conclusión de quedar un diálogo abierto entre todos a media que avance el proyecto”, expresó Andrés Rico, presidente electo JAC Bocagrande.
Lidia Patricia Zablatzky, presidenta de la JAC de El Laguito reconoce que las obras son necesarias pero lamenta que su sector no haya sido incluido en las intervenciones: “Estamos inconformes porque nosotros también nos inundamos pero esperamos que más adelante nos tengan en cuenta porque serán obras para el progreso de la ciudad”.
