Nuevamente se acerca la fecha de vencimiento de un decreto y los cartageneros se preguntan qué va a pasar con las medidas que aún hay en la ciudad para contener la propagación de la COVID-19, teniendo en cuenta que hasta mañana, 15 de septiembre, está establecida la rotación del pico y cédula de dos dígitos y otras disposiciones.
En su momento las autoridades manifestaron que se mantenía esta restricción para evitar la circulación masiva de ciudadanos y tener un control del comportamiento del virus. Y, aunque aún no hay un decreto que rija a partir del 16 de septiembre, todo indica que la medida ha sido efectiva en la ciudad.
Según dio a conocer la Alcaldía de Cartagena, para esta nueva fase se desea continuar con el pico y cédula pero con algunas modificaciones, solicitud que debe ser aprobada desde el gobierno central.
“El alcalde quisiera que un día salgan los pares y otro los impares. Esa es la propuesta de Cartagena pero todos los decretos tienen que tener el visto bueno del Ministerio de Salud”, afirmó el secretario del Interior, David Múnera.
Aunque el funcionario no entregó muchos detalles de esta petición, El Universal conoció que la ampliación del pico y cédula responde a una de las solicitudes hecha por los gremios.
En caso de que sea aprobada esta rotación sería la primera vez que se aplica en la ciudad, pues desde el inicio de la pandemia se ha permitido la salida desde dos y hasta cinco dígitos, y durante un tiempo se dividió entre mujeres y hombres.
Por otra parte, Múnera indicó que se planteó la necesidad de continuar con las playas cerradas por lo menos hasta el 1 de octubre.
“Mantenemos la restricción de playas porque el montaje es bien complejo. Estamos desde hace casi dos semanas trabajando en ese protocolo, hay que dividir, hay que poner estacas, hacer aislamiento, y eso requiere una inversión mas o menos grande. Estamos en ese proceso , por eso no consideramos conveniente que las playas se abran a partir del 16”, puntualizó.
Excepciones
Paralelo a la ampliación del pico y cédula, en este nuevo decreto se continuaría con las mismas excepciones, ya que permiten dinamizar la economía y evitan que los ciudadanos “salgan a pendejear”.
Actualmente los exceptuados del pico y cédula son los viajeros, turistas o foráneos, quienes deben tener el documento, reserva o tiquete que demuestre su ingreso a la ciudad.
De igual manera aquellos que tengan una reserva en un establecimiento de comercio, vayan a salir de la ciudad o laboren en las actividades permitidas (previa acreditación) pueden circular sin tener en cuenta la rotación.
La asistencia a servicios religiosos y la realización de actividades físicas al aire libre tampoco está sujeto a esta medida.
