En días pasados, algunos residentes del barrio Los Cerezos se quejaron por la enorme reja que instalaron sus vecinos de la urbanización El Gallo en una vía por donde ellos solían cruzar para acortar camino hacia sus casas y viceversa.
En esa oportunidad, manifestaron que ese bloqueo les generaba afectaciones porque a los residentes más cercanos a ese punto les tocaba darse una vuelta grande para llegar a su destino y tardar más tiempo en ese trayecto. Así mismo, precisaron que en esas largas caminatas se exponían a la inseguridad de la zona.
(Lea nota relacionad: “No podemos cruzar hacia nuestro barrio por esa reja”).
Los residentes de Los Cerezos pidieron acuerdos con el barrio vecino o intervención de las autoridades, pero hasta el momento la obstrucción continúa y todo indica que seguirá allí, ya que los moradores de El Gallo señalaron que la reja fue instalada por protección y ha servido mucho para frenar los delitos.
Anteriormente había un pasaje peatonal en la reja, pero este también fue clausurado. //Foto: Luis Herrán.
¿Qué dijeron?
Los integrantes de la Junta de Vecinos de la Urbanización El Gallo precisaron que el punto donde se ubicó la barrera es el final de la única calle que tienen. Además, a partir de ese tramo no continúa propiamente la vía sino que se transforma en una calle canal que sirve de desagüe cada vez que caen lluvias, y que es poco transitada por ellos. A raíz de esa acción, quedaron con una única entrada por la que también salen, así que ahora solo tienen un acceso.
(Lea: En cuarentena hubo más de 200 mil ayudas humanitarias).
“Nosotros somos una urbanización muy pequeña, con una sola calle, tenemos alrededor de 50 viviendas. En cambio quienes viven en Los Cerezos sí cuentan con varias entradas, tienen dos del lado de la carretera del 13 de Junio y dos más hacia La Cordialidad. Además, ellos en sus propias calles han instalado talanqueras y cerrado algunas vías porque la inseguridad también los golpea. Nosotros también estamos en todo el derecho de protegernos de la delincuencia, por eso colocamos esa reja”, afirmó un morador que pidió reserva de su identidad.
El cierre de la calle se hizo en abril pasado, con la pandemia del COVID-19 ya presente, y obedeció básicamente a que en ese momento los atracos estaban incrementados a cualquier hora del día. Había hurtos a residentes, fleteos en motos, exceso de vendedores ambulantes y demás, pero a raíz de la reja todo cambió para bien en El Gallo, por eso sus vecinos afirmaron que su intención es continuar con ella.
