Los sistemas de protección contra incendios en la ciudad no son los adecuados.
Esa es la conclusión de las indagaciones realizadas por Ernesto Poveda García, arquitecto honorario de la SCA, bombero certificado por la Dirección Nacional de Bomberos de Colombia y miembro de la NFPA, organización de seguridad humana y protección contra incendios más grande y reconocida del mundo.
El profesional asevera que las edificaciones no están cumpliendo con el título J de las normas de sismorresistencia y que, al menos, el 90 por ciento de los sistemas contra incendios en edificaciones en la ciudad no están bien instalados, “no están aptos, ni certificados”. Incluso, algunos edificios no tienen estos sistemas de protección contra incendios.
Poveda explica que la Ley 400, norma de sismorresistencia (Título J de la reforma del 98), establece que los sistemas de protección contra incendios se dividen en dos. El primero: Sistemas de detección temprana y alarmas. El segundo: sistemas de extinción.
“Deben tener sistemas propios para apagar incendios, pero esto no se está cumpliendo a cabalidad, bien sea por desconocimiento o falta de criterio de autoridad”, indica Poveda.
“Desde la Sociedad de Ingenieros hemos hecho unos 50 estudios, donde es preocupante la situación, donde se ha capacitado en universidades en Cartagena y otras ciudades.
“La propiedad horizontal en Cartagena es una de las cosas que debemos proteger como situación histórica e imagen internacional. A los administradores se les ha invitado para que los sistemas sean el número uno en cualquier propiedad, sea por residencia, industria, comercio u otra razón”, agregó.
Explicó que pese a que las normas incluyen a distintos entes para controlar estas situaciones (inspectores de policía, oficinas de control urbano, planeación y la Superintendencia de Notariado y Registro), aún no se están haciendo las cosas como se deben con la prevención de incendios en edificaciones.
“Cada vez que expedimos un certificado por un ente del gobierno, estamos colocando que todo está bien, donde relativamente para nosotros, desde la IPCF -Ingeniería de Protección Contra el Fuego, no está bien.
“Se están firmando servicios que vemos que no se están cumpliendo. Desde la IPCF queremos aportar. También se pueden ofrecer asesorías desde la Sociedad de Arquitectos o la Sociedad de Ingenieros y Arquitectos de Bolívar”.
Ernesto Poveda García agregó que desde la Sociedad Colombiana de Ingenieros, la Sociedad de Ingenieros y Arquitectos de Bolívar y el Colegio de Propiedad Horizontal se vienen haciendo esfuerzos para generar conciencia en las distintas comunidades y a las autoridades.
A continuación, conozca cuáles los puntos claves de esta situación:
“No solo se desconoce desde la parte construcción y el reglamento, sino también se viene desconociendo desde las administraciones, las cuales contratan servicios con bajo perfil o bajo nivel de capacidad y conocimiento, generando riesgos como los que se han presentado en Cartagena en los últimos tiempos. A la fecha, llevamos más de cinco incendios en edificaciones. A las edificaciones no se les dejan helipuertos si los necesitan, y cuando se quema un edificio las llamas van para arriba y la gente de arriba queda expuesta. El mayor número de incidentes es por falta de detección. Si tuviéramos sistemas que nos alertaran diciéndonos ‘aquí hay calor o humo’, suena la alarma y nos ponemos pilas, pero no lo detectamos a tiempo porque no hay sistemas efectivos. No hay sistemas de extinción, como dice la norma, y muchos no los tienen. El incumplimiento es del 90 por ciento”, indicó Poveda.
Poveda señala que no hay supervisión técnica adecuada para los sistemas de protección contra incendios. “No se exige supervisión técnica, ni se está revisando adecuadamente en prevención de incendios. Hay una legislación para eso y no se está cumpliendo”.
El ingeniero Poveda indica que no habría personal capacitado en la ciudad para implementar sistemas de protección, como lo demanda la norma. “No hay gente capacitada. Con el sistema de protección contra incendios cualquiera instala una bomba, cualquiera instala una tubería. Pero no manejan la normativa y es donde se debilita el sistema. Esto es para que lo manejen empresas especializadas y que tengan criterio, que puedan evaluar, y que a la hora de pedir certificados esta persona también sea idónea. Como no se encuentran a la mano, pasa lo que está pasando. Y el único beneficiario es la compañía de seguros, porque duramos toda una vida pagando una póliza de seguro y que a la hora de que se nos queme el edificio nos digan ‘no, pero es que usted no cumplió con las normas NFPA, no cumplió con las normas de sismorresistencia’. Y así han negado a nivel nacional muchas pólizas, incluyendo a Cartagena.
“En la zona suroriental hay edificios que han tenido más de un conato de incendio y no se hacen correctivos, y son edificaciones que solo tienen cinco años. No existen sistemas de detección y eso es un cabal cumplimiento para prevenir incendios. Hay fallas en el sistema de extinción: bombas, tableros y depósitos de agua. La comunidad compra un edificio y cuando la gente lo recibe y hay conato, se dan cuenta de que no se cumplía con las normas. Los afectados son los usuarios, porque a la hora de indemnizar bienes y mercancías, las compañías de seguro no responden, porque no se cumplen con las normas”.
Poveda asegura que el personal del Cuerpo de Bomberos que tiene la ciudad sería insuficiente. “Falta personal y también más estaciones. Como lo cita el Plan de Ordenamiento Territorial, debe haber un bombero por cada mil habitantes, aproximadamente. Estamos lejos de eso. Por la altura de los edificios en Cartagena, algunos de los cuales ya superan los 40 pisos, a los equipos de bomberos legalmente les queda muy difícil, porque los carros no están en la capacidad de responder a esas alturas. Y es un personal que ha trabajado toda una década, la ciudad amerita que se le ayude y apoye a esta unidad con personal nuevo, ampliando la planta y ampliando estaciones, como las que hacen falta en Mamonal, la Zona Norte y la zona suroccidental.
“Tenemos tres estaciones que siempre han cumplido y admiro a los bomberos, que por su capacidad y repuesta han controlado el fuego, pero recuerde que Cartagena es un punto donde la brisa supera los 40 nudos en ciertas épocas. Estos calores y fatigas que se producen en los materiales son muy propensos para incendios”.
“Hoy en día hay mayores riesgos porque usamos materiales menos resistentes al fuego, y hay consumos de voltaje muy superiores. Antes eran cosas básicas las que se tenían en la casa o en los apartamentos, ahora hay súper lavadoras, neveras, aires acondicionados, celulares y todo está automatizado. Y los materiales cada vez son menos resistentes. Eso desfortalece a la comunidad y si no tenemos equipos adecuados, estamos en riesgo. Cartagena es una ciudad que necesita control y no solo esta ciudad, sino todo el país”.