En el año 2016, a Carmen Beltrán Pájaro, quien en ese entonces laboraba como empleada doméstica, le ocurrió una de las cosas más indignantes que le pueden suceder a un ser humano. Carmen acompañaba al hijo de su empleadora a una fiesta en el Club Naval de Suboficiales, cuando le dijeron que en el sitio no se aceptaban empleadas domésticas y le pidieron que se fuera.
El hecho de discriminación fue noticia nacional, y fue el abogado Kriss Urueta León el encargado de representar a Carmen para restablecer sus derechos.
“El Club Naval tenía un reglamento en el que excluían y prohibían la entrada de las empleadas domésticas, pero no solo eso, sino que las comparaban con los animales, porque en uno de los parágrafos del reglamento se establecía que se prohibía el ingreso de empleadas domésticas y de mascotas. Cuando me llegó ese caso pensé que era terrible e iniciamos una acción constitucional contra el Club de Suboficiales y contra la Armada, porque el reglamento era a nivel nacional”, explicó Urueta.
Carmen ganó la tutela y el Club Naval de Suboficiales y la Armada tuvieron que retirar la prohibición del reglamento. También, tuvieron que pedir disculpas públicas y hacer capacitaciones a sus trabajadores en el respeto de los derechos humanos.
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Ese fue uno de los primeros casos de discriminación en Cartagena que asumió el abogado Kriss Urueta León, quien el pasado 5 de diciembre fue galardonado con el premio “Afrocolombiano del año” en la categoría de justicia y derecho, un reconocimiento que es entregado por la Fundación Color de Colombia y El Espectador.
Urueta siempre ha trabajado bajo la convicción de que la discriminación se tiene que acabar y de que en Cartagena no debe haber lugar para ningún tipo de exclusión.
“Estoy feliz porque este reconocimiento se convierte en un impulso para seguir con esta lucha y decirle a la gente que no es viable discriminar a nadie, que todos somos iguales y este reconocimiento me motiva a seguir en Cartagena dando esta batalla. Cada vez que ocurra un hecho de discriminación y me busquen ahí estaré”, expresó.
Y es que para él, el caso de Carmen marcó un precedente en la ciudad, pues en sus palabras “en Cartagena es muy difícil que alguien se atreva a levantar la voz” y al ganar esta tutela se envió un mensaje contundente sobre lo que es posible lograr si se ponen en conocimiento estos casos.
“Restablecerle la dignidad a la señora Carmen fue muy gratificante y significó que con el derecho podemos enseñar a la sociedad a que no se puede estar discriminando, que hoy el racismo no tiene cabida en la sociedad y también para decirle a la gente que aquí en Cartagena hay un abogado que trabaja por estos temas sin ninguna remuneración a cambio, que lo hacemos simplemente por la convicción de que este flagelo tiene que acabar”, puntualizó.
Una lucha incansable
El ideal sería que estos hechos de discriminación no ocurrieran, sin embargo son varias las ocasiones en las que Kriss Urueta ha tenido que representar a personas que les han vulnerado sus derechos.
Uno de ellos fue el caso de 20 mujeres afrodescendientes y cabezas de hogar que fueron desalojadas de su puesto de trabajo en Castillogrande por parte de la Alcaldía.
“Fue en medio de la pandemia. Cuando se reabrió la economía las mujeres quisieron volver a su puesto de trabajo porque su sustento venía de la calle, pero las sacaron, les desmontaron sus kioskos y en primera instancia nos fallaron en contra. Para mí fue duro pero yo soy un luchador incansable y las veces que me digan que no, insisto por las vías legales. Apelamos y afortunadamente revocaron la sentencia y se ordenó que a las mujeres se les respetara el principio de confianza legítima y las reintegraran a su trabajo”, explicó.
Otro caso que tuvo eco fue el del joven Víctor Padilla contra el Hotel Cartagena Plaza, el cual ocurrió este 2022. En este caso, el joven fue discriminado por su cabello afro durante una entrevista de trabajo. El hotel tuvo que disculparse públicamente, capacitarse en derechos humanos y comprometerse a no incurrir en prácticas racistas.
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“Ese fue un fallo bastante bonito por lo que implicó restablecerle la dignidad a Víctor. Muchas personas no lo entienden, pero para muchos negros y negras su cabello y su color de piel es importante. La igualdad es un derecho garantizado en la Constitución en el artículo 13 y no podemos segregar a nadie por ninguna circunstancia”, manifestó Urueta.
Trabajo por hacer
Para el abogado, en Cartagena aún hay mucho trabajo por hacer para eliminar la discriminación y por ello aseguró que es necesario que se realicen campañas institucionales contundentes que permitan educar a la gente contra este flagelo.
“A mi juicio lo que falta son más campañas institucionales, ha habido ejemplos de personas o fundaciones que hacen estas campañas de manera particular y privada pero como no tienen respaldo público esto se acaba. Estamos hablando de derechos humanos y aquí juegan un papel fundamental el Estado y la administración distrital”, indicó.
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Urueta resaltó que es especialmente preocupante lo que ocurre en el sector turístico de Cartagena, donde son frecuentes estos casos. “Parece que los negros y las negras estuviéramos desamparados en Cartagena. Aquí nos discrimina la Policía, los hoteles, los restaurantes... El sector turístico discrimina mucho en la ciudad y parece que no hay control, que nadie los vigila y que hacen lo que quieren”, expuso.
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Es por eso que insistió en el rol que debe tener el Estado en este tema y la necesidad de impactar a las personas a través de la educación. Mientras tanto, afirmó que seguirá luchando y representando a quienes lo necesiten e invitó a más profesionales a hacer lo mismo.
“Como abogados debemos hacer un aporte a la sociedad y la manera como yo lo hago es representando a las personas discriminadas. Por eso les digo a los colegas, a los demás abogados, que no necesariamente tiene que ser contra el racismo, pero sí hay que brindarle algo a la sociedad. Y si se suman a esta causa, mucho mejor, porque entre más personas haya luchando contra esto tendremos mayores posibilidades de acabar este flagelo”, aseguró.
Es así que afirma que todos podemos hacer de Cartagena una ciudad menos excluyente y más respetuosa de los derechos y las libertades de todos sus habitantes.
Kriss Urueta León es abogado egresado de la Universidad de San Buenaventura y magíster en derecho de la Universidad Externado de Colombia. Trabaja como abogado litigante y ha sido docente de varias universidades.
Urueta también es gestor cultural y desde el 2016 es el director del Festival de Salsa Cartagena en Clave.
