Continúa la polémica por los retrasos que podría causar la entrega de la primera playa del macroproyecto de Protección Costera, que está entre las calles 13 y 11 de Bocagrande. Desde Proplaya, consorcio encargado de las obras, aseguraron que no hay evidencia de que la nueva playa sea peligrosa para los bañistas y que esta se hizo de acuerdo a los diseños del proyecto. (Lea: “No hay evidencia de corrientes peligrosas”: consorcio de Protección Costera)
El presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de Bocagrande, Andrés Rico, cuestionó al Distrito por las demoras para habilitar esa nueva playa, teniendo en cuenta la alta temporada turística en la ciudad y las restricciones en la zona por los trabajos que se vienen adelantando, lo que implica menos kilómetros de balnearios a disposición de visitantes y locales. (También le puede interesar: “Demora en entrega de playa implicaría más compensación”: Proplaya)
“Todo el embrollo para la entrega de playa 5 se ha dado en gran medida por la falta de liderazgo por parte del Distrito de Cartagena, pues en cuatro meses no han sido capaces de trabajar conjuntamente con el Gobierno nacional, a través de la Ungrd. Ante esta situación no se han podido realizar los Comités de Gerencia, donde todos los actores del proyecto estábamos enterados del desarrollo de las obras, cambios en diseños y otras situaciones”, indicó el dirigente comunal.
Y reiteró: “Nuevamente hacemos un llamado para que se logren estos espacios, en lo que hemos sido insistentes, de tal forma que las dudas e inquietudes que se tengan puedan ser solucionadas por parte de los involucrados y no que se convierta en un teléfono roto”.
La semana pasada la Alcaldía de Cartagena visitó las obras del macroproyecto de Protección Costera para verificar el avance de estas. Ese día el alcalde William Dau Chamat aseguró que esperaba entregar la primera playa a los cartageneros como regalo en Navidad.
No obstante, después de un Comité Local de Ordenamiento de las Playas (CLOP) se determinó que la playa 5, entre las calles 13 y 11 de Bocagrande, aún no era segura para bañistas.
De acuerdo con el Distrito, el resultado de la revisión hecha estableció en un primer análisis, bajo el enfoque de la seguridad integral marítima y protección del medio marino, que las playas en el momento no son seguras para ser abiertas, por lo que deben verificarse aspectos técnicos entre el contratista, la interventoría y el diseñador del proyecto, que es la Universidad de Cartagena.