<img src="https://sb.scorecardresearch.com/p?c1=2&amp;c2=31822668&amp;cv=2.0&amp;cj=1">

“Hay que fortalecer el cuidado de los animales”

En dos años la fundación Isla Animal ha logrado esterilizar 1.122 animales entre gatos y perros en la zona insular, y en barrios de Cartagena y Bolívar. Esta es la historia de su labor.

Es imperativo el apoyo a las organizaciones que defienden los intereses de las mascotas en Cartagena y Bolívar, entidades que velan por el bienestar de perros, gatos y demás animales que en muchos casos se convierten en un miembro más de las familias y son sinónimo de amor, lealtad y compañía, pero que en otros sufren la indiferencia y el abandono.

Desafortunadamente, Cartagena se ha convertido en epicentro de numerosos casos de maltrato animal, tal como ocurrió semanas atrás con el crudo hallazgo de un perro amarrado a una de las boyas en la bahía de la ciudad, ahorcado y muerto. El Universal conversó con una de las fundaciones líderes en la protección animal de la ciudad.

“Estos casos son el triste reflejo de lo que pasa en esta ciudad indolente. Encontramos animales golpeados, macheteados, violados, mutilados, lanzados por balcones, envenenados y quemados, mientras las autoridades son indiferentes. Vivimos en una sociedad que maltrata y abandona a los animales sin ningún tipo de castigo”, aseguró Lina Patiño, directora de la fundación Isla Animal.

Una gran labor

Isla Animal es una fundación cartagenera que nace por la voluntad de un grupo de mujeres liderado por la chef Lina Patiño, quien renunció a su profesión por la valerosa labor de proteger a las mascotas vulnerables. Su trabajo se desarrolla especialmente en la zona insular, teniendo como prioridad la esterilización y el rescate de perros y gatos abandonados.

En su labor, la fundación ha ayudado a perros y gatos en estado crítico, brindando una mano a los más necesitados, rescatándolos, y rehabilitándolos física y emocionalmente, para luego entregarlos en adopción responsable en ciudades como Bogotá, debido a la poca cultura de adopción y tenencia responsable que hay en Cartagena.

Otras actividades realizadas por la fundación a lo largo de dos años de funcionamiento han sido las jornadas de salud, de alimentación y apoyo a refugios o rescatistas independientes.

El respaldo de las personas ha sido esencial. Isla Animal trabaja en comunidades donde hay sobrepoblación canina y felina, y cuenta con personas que tienen amor y respeto por los animales, ellos son quienes ayudan a realizar los censos y a buscar sitios aptos para desarrollar las campañas de esterilización y divulgarlas en la comunidad. Mientras, el equipo conformado por cuatro voluntarias y la directora, se encarga del acompañamiento en jornadas de esterilización, hogares de paso, donaciones, rifas, venta de productos, recolección de recursos y el manejo de las redes sociales, con el objetivo de recaudar fondos para esterilizar a 50 o 60 animales por mes.

No ha sido fácil

Durante la pandemia, la situación fue crítica porque, como explicó la médico veterinaria y colaboradora de Isla Animal, Isabel Marrugo. “En la zona insular de Cartagena los peludos se alimentaban mayormente de lo que proveían los turistas y, ante la ausencia de estos, debido a las restricciones, muchos de los animales quedaron sin alimentos, por eso la fundación realizó distintas actividades para llevarles comida”, sostuvo la mujer.

Isla Animal no tiene ningún tipo de alianza pública o privada, los recursos son conseguidos a través de un arduo trabajo voluntario con la realización de distintas actividades y de donaciones brindadas por ciudadanos sensibles a la labor. No obstante, cuenta con el apoyo de otras organizaciones a nivel nacional como Dog Pack y Arca Luminosa, dedicadas al rescate y la adopción de mascotas en Bogotá, coordinando y tramitando adopciones responsables para personas que residen en la capital del país.

“Lo más duro en Cartagena es la corrupción, la indiferencia e ignorancia. Vivimos en una ciudad en la que hasta en el barrio más exclusivo encuentras un animal callejero en pésimas condiciones y en donde pocas personas tendrán la iniciativa de brindarle ayuda’”, manifestó Patiño.

Un caso especial

La veterinaria Isabel Marrugo nos habló de un caso especial para la fundación. Se trata de Piñita, una dulce perrita rescatada en el sector Isla de León, de El Pozón, uno de los sectores más deprimidos en Cartagena. Su estado de salud era precario, se encontraba abandonada con úlceras en ambos ojos, hemoparásitos, sarna, hongos y desnutrición. Su rescate fue posible gracias a la también chef María Restrepo Porto, quien realizaba una labor social con niños del sector y halló a Piñita, entregándola posteriormente a Isla Animal.

A partir de ese momento se realizó un arduo trabajo de recuperación. En ese proceso se percataron que había perdido la vista.

Después del tratamiento, “ya recuperada viajamos a Bogotá donde fue a encontrase con su nueva familia”.

Hoy Piñita se encuentra en óptimas condiciones y completamente recuperada. Más allá de la ceguera, “es un animal noble, súper fuerte y con un carácter espectacular. Nunca pensé que pudiera recuperarse y que tuviera una vida feliz”, aseguró Isabel Marrugo.

Más noticias