En el corregimiento de Pasacaballos, un grupo de activistas y familias que habitan en dos nuevas invasiones de la zona rural, se congregaron en las afueras de la sede de la Inspección de Policía para buscar respuestas y apoyo ante una inminente amenaza de desalojo.
Las comunidades aledañas a una empresa privada temen perder las viviendas y sobre todo los predios que han ocupado durante más de cuatro meses. Lea: Protestaron en el canal del Dique porque llevaban ocho días sin luz
La controversia gira en torno a las tierras en disputa, que al parecer la empresa privada reclama como suyas. Estas tierras se encuentran en la vereda Membrillal, cerca del turno de las busetas.
Rodolfo Salcedo, un activista de la zona, expresó su preocupación por la supuesta falta de atención por parte del inspector, quien según él se ha mantenido en silencio frente a las demandas de las comunidades afectadas.
“La gente está angustiada porque las van a sacar de esas tierras, para mañana 28 de septiembre está programado el primer desalojo. La empresa que reclama estos terrenos es Rehabiductos y eso dejaría sin hogar a más de 200 familias, por eso nos vinimos acá a la Inspección de Policía a buscar explicaciones”, sostuvo Salcedo.
Según las familias protestantes, la empresa ha enmallado su área de operaciones y ahora está reclamando las zonas alrededor, donde se encuentran las invasiones Rehabiducto y 24 de Mayo; sin embargo, añadieron que existen documentos donde consta que algunas de estas tierras pertenecen a la Gobernación de Bolívar, a la cual le han hecho la solicitud de concedérselas para vivir allí de forma segura y legal.
Estas familias indicaron que han trabajado arduamente en esa tierra, cultivando yuca, plátano, maíz y otros cultivos esenciales para su subsistencia. Lea: En vivo: así avanza la marcha a favor de las reformas del Gobierno en Cartagena
Los residentes insisten en que las tierras no son propiedad de Rehabiductos, y aseguran que la Gobernación de Bolívar envió una delegación para llevar a cabo censos en la zona.
Las comunidades afectadas esperan que el inspector de Pasacaballos brinde una respuesta inmediata y abierta a sus demandas, y que se lleve a cabo una revisión exhaustiva de la documentación relacionada con la propiedad de las tierras en disputa.
Mientras tanto, la lucha por vivir dignamente y mantener sus hogares continúa en medio de la incertidumbre.