Aunque fue en un lugar distinto, la escena era la misma que vivieron el mes pasado los habitantes del barrio Henequén. Un caudal de cientos de litros de agua recorrió ayer una de las calles del barrio Ceballos, mientras los residentes permanecían asombrados por la emergencia que irónicamente inundó la zona, pero dejó una vez más sin servicio de agua potable a media Cartagena.
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El problema fue el mismo que ocurrió exactamente hace 20 días, una avería en un tramo de tubería de 1.000 milímetros de diámetro provocó el derrame del líquido que fue controlado por una cuadrilla de Aguas de Cartagena (Acuacar), que rápidamente acudió al sitio y emprendió los trabajos de reparación, los cuales estaban previstos para terminar en 24 horas, pero luego de la labor del personal técnico de Acuacar terminaron antes de lo pensando.
Fredy Ángulo, gerente técnico de Aguas de Cartagena explicó que entre la noche de ayer y la madrugada de hoy el servicio se restableció por completo.
“Lo importante es que pudimos reparar el daño en tiempo récord, en menos de nueve horas tenemos el tubo habilitado y estamos restableciendo el bombeo a plena capacidad para que en la noche y madrugada ya tengamos completamente restablecido el servicio a los cartageneros”.
Es de resaltar que varios de los usuarios expresaron a este medio sus inquietudes por este tipo de emergencias, incluso fue relacionada con el daño ocurrido el 28 de diciembre.
“Otra vez la misma triste historia. Hay que realizar una bitácora de cuántas veces al año se presentan estos problemas”; “se ha vuelto recurrente este tipo de daños, pero los cargos fijos llegan puntuales”, fueron algunos de los comentarios hechos a través de nuestras redes sociales.
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Sin embargo, Ángulo explicó que el daño se trató de un hecho fortuito y no tuvo ninguna relación con lo ocurrido en diciembre en Henequén, agregó que de hecho en el punto de la emergencia son pocos los percances que se han presentado en los 20 años que lleva de instalada la tubería. No obstante, resaltó que investigarán el hecho.
“En este punto de la ciudad no habíamos tenido daño de esta tubería, de hecho esta tubería que tiene más de 20 años de instalada, en su vida útil ha registrado muy pocos daños o roturas. Se trató de un hecho fortuito, no guarda ninguna relación con el del 28 de diciembre, fue una casualidad que la misma tubería se rompa en puntos diferentes, distantes en más de tres kilómetros cada uno, de todas maneras es materia de estudio”.