Residentes contiguos al parque del Reloj Solar, en el Pie del Cerro, en una de las cuatro esquinas que domina el Castillo de San Felipe, están buscando una estrategia para recuperar este entorno.
Hoy el parque, aunque fue recuperado durante la administración del alcalde Dionisio Vélez, ya presenta afectaciones en su infraestructura, y afronta una de las mayores invasiones de su espacio, la mayor durante todas sus épocas.
Su mantenimiento estuvo a cargo del consorcio de aseo Pacaribe y el diario El Universal. Pero hoy los grupos de vendedores de la zona, la cual es muy concurrida, la aparición de ventas estacionarias de comidas y topo tipo de artículos, prácticamente se han apropiado del parque.
Esto ha incrementado las basuras, el desorden en el sector, lo que afea esta cara de la ciudad.
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Hay ventas de zapatos, ropa, tintos, cigarrillos, y todo tipo de artículos; así como comidas rápidas que se han estacionado en sus márgenes.
Asimismo el fenómeno de la migración de familias venezolanas, han hecho del espacio del parque prácticamente su lugar de residencia. Vendedores de confites, limpiadores de vidrio, mimos, bailarines, y músicos concurren en este espacio público de manera permanente. En el mismo se pueden apreciar como se colocan en sus muros todo tipo de utensilios y accesorios personales de las personas que allí concurren.
Asimismo algunos residentes han denunciado el consumo de bebidas embriagantes y de sustancias alucinógenas, por lo que piden que sea incluido en el futuro plan de zona libre de drogas. También se han denunciado actos indecorosos por parte de parejas que concurren al lugar en las noches.
Los moradores le piden a la administración distrital buscar salidas para recuperar el parque. En las noches debido a que el parque está sin luz, muestra su peor cara.
Algunos negocios del sector están dispuestos a unirse para mejorar la cara de este parque, en otros tiempos un emblemática de Cartagena.
